BILBAO. A su juicio, éstos tienen una visión de la acción pública "que no contempla a las comunidades autónomas y que se cuece en las instituciones centrales".
En una entrevista concedida a Onda Vasca, recogida por Europa Press, Erkoreka ha señalado que "la esperanza nunca se debe perder" de que, tras el 26 de junio, haya un cambio en la postura de recentralización en el nuevo Gobierno central.
En este sentido, ha advertido que "también es verdad que algunas de las nuevas formaciones políticas que irrumpen en el escenario y que han estado presentes ahora, en esta última composición de las Cortes Generales, no habiéndolo estado en la época de la mayoría absoluta del PP, que son capaces de compatibilizar un discurso, teórico y general, muy comprometido con la plurinacional del país, con la defensa de políticas de ámbitos de acción pública concretas que son fuertemente recentralizadoras".
Según ha precisado, "hacen un diseño de sus políticas sociales o formulan una visión de la acción pública que desearían llevar a cabo, que no contemplan las comunidades autónomas, que se cuece en las instituciones centrales del Estado".
En este sentido, ha criticado que "se diseña, se ejecuta desde las instituciones del Estado, y no cuentan con las comunidades autónomas nada más que como meros ejecutores de decisiones políticas que se adoptan en el poder central".
"Por tanto, habrá que ver en qué se traducen realmente estos discursos que pueden ser muy generosos en el reconocimiento de la pluralidad del Estado en lo teórico, en lo general, pero que, en la práctica, acaban haciendo planteamientos enormemente recentralizadores", ha aseverado.
AGENDA VASCA
Por ello, espera que el nuevo Gobierno central "preste atención a la agenda vasca y muestre una buena disposición para hablar, compartir y para afrontar conjuntamente los problemas que se refieren a Euskadi junto a las instituciones vascas".
"Esto es algo que no hemos vivido durante la legislatura de la mayoría absoluta de Rajoy, que recibió cientos de requerimientos del lehendakari para afrontar conjuntamente un sin fin de asuntos que estaban en la agenda vasca, pero desatendió todos. Es una experiencia que no nos gustaría reeditar porque es profundamente negativa", ha indicado.
