MADRID. El exalcalde de Boadilla del Monte (Madrid) Arturo González Panero (PP) ha pedido al juez de la Audiencia Nacional José de la Mata que acuerde un careo entre él y su hijo, después de que este haya "faltado deliberadamente a la verdad" cuando ha testificado en su contra en el marco del caso 'Gürtel'.
El exregidor madrileño ha dirigido un escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que considera que el careo es la única diligencia que puede arrojar un "atisbo de luz" a los hechos investigados y "solventar las contradicciones" entre las versiones de padre e hijo.
González Panero ha efectuado esta petición después de que su hijo, Arturo González Villarroya, declarara el pasado 27 de abril que su progenitor le había utilizado para conseguir un teléfono móvil de prepago con el fin de repatriar fondos desde el extranjero.
El antiguo alcalde 'popular' ha aportado una copia de las conversaciones de WhatsApp intercambiadas con su hijo entre junio y septiembre de 2015 y que "ponen en serias dudas" que la declaración "sea imparcial o siquiera veraz". Dicho esto, detalla las "grandes contradicciones" en las que, a su juicio, incurrió el testigo.
Según dice, Villarroya "faltó deliberadamente a la verdad" cuando dijo que se enteró en junio de 2015 de que habían imputado a la hermana del compañero que le dio ese teléfono móvil. Lo cierto, añade, es que conoció la inculpación desde el mismo abril, cuando preguntó a su padre por el resultado de la declaración de la joven.
NIEGA LA TRANSFERENCIA A CHINA
González Panero desmiente haber efectuado una transferencia de 300.000 euros a China y destaca cómo su hijo se ha desdicho en varias ocasiones al hablar sobre el hallazgo de un pen drive, en el que grababa a su padre música, que contenía documentación que le incriminaba.
"Jamás nadie le ha grabado música por el mero hecho de que nunca le ha gustado escuchar música, extremo este último fácilmente comprobable mediante el testimonio de cualquiera de las personas de su entorno", añade su abogado.
"Sobra mencionar lo poco creíble que resulta que una persona que presuntamente ha cometido unos hechos que pudieran reputarse como delictivos, mantenga prueba de tales hechos en un pen drive al azar y, al alcance de cualquier persona, durante más de tres años", prosigue.
González Panero revela que ha llegado a vender sus objetos personales para abonar la matrícula del curso que estudia su hijo hasta que en el verano pasado le trasladó su imposibilidad de abonar los del año 2015-2016. En ese momento, añade, su exmujer Elena Villarroya se ofreció a asumir el pago y "justo" entonces su hijo acudió a la Fiscalía Anticorrupción. El Ministerio Público pidió la pasada semana archivar el caso de Elena Villarroya.
"Parecería que esta tendría intereses directos en la declaración del señor Villarroya y que pudiera ser ella --que figura como beneficiaria y titular real de las cuentas bancarias de la sociedad Longridge--, quien condicionara la declaración de su propio hijo para utilizarlo en beneficio propio", advierte la defensa.
En su opinión, sería lógico pensar que si ambos hubieran tenido una discusión sobre dicha transferencia, eso hubiera quedado reflejado en sus conversaciones máxime teniendo en cuenta tales problemas económicos.
El abogado, que niega que su cliente haya presionado al joven para no declarar en la causa, ha solicitado de forma subsidiaria al juez que cite a declarar a González Panero en calidad de investigado, en caso de rechazar la práctica del careo, con el fin de que pueda explicar y manifestar su versión de los hechos que su hijo le pretende atribuir. Autor: BVEL/MLUZ