Bilbao - En su primera comparecencia televisiva tras el ofrecimiento de Podemos para encabezar su lista a las autonómicas, la magistrada Garbiñe Biurrun mostró su discrepancia con una de las metas de la formación en suelo vasco. La aspirante a encabezar su plancha electoral difirió ayer con la cúpula del partido sobre la intención de derribar la posición hegemónica del PNV. La formación asamblearia ha apuntado por activa y por pasiva que desalojar a los jeltzales es su objetivo estratégico, si bien Biurrun discrepó no solo con ese “mensaje”, sino también con el “contenido” de uno de los principales leit motiv que manejan. No lo ve “muy positivo”, dijo en un plató frente al secretario de Organización, Lander Martínez, para posteriormente repasar la capacidad pactista que ha demostrado el partido de Sabin Etxea para conformar gobiernos en la CAV con partidos de diferentes ideologías.
El programa Egun On Euskadi de ETB1 fue escenario del choque de posicionamientos entre Martínez, número 3 de Podemos en la CAV, y la que en breve podría convertirse en candidata, que acudía como comentarista y que aún sopesa si finalmente dará el paso. “No veo muy positivo ese mensaje de desalojar al PNV -remarcó-. Ni por imagen ni por contenido. Por un lado todavía escucho en España que el PNV es un partido que ha gobernado casi solo”, una etiqueta que a juicio de Biurrun no es ajustada a la realidad. “Si en toda su vida ha habido alguien que ha hecho gobiernos de coalición” han sido los jeltzales. La presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) avaló su tesis haciendo un repaso a los diferentes Ejecutivos de Gasteiz bajo el mandato del PNV. De este modo, recordó que han confluido “con el PSE, durante un tiempo cuando el PSE y EE eran dos partidos, más recientemente con EA y Ezker Batua, en la que se acordó una agenda social. Y ha estado cuatro años en oposición”, puntualizó para refrendar que la formación morada no debería de cerrarse de antemano a explorar ninguna fórmula compartida de gobierno.
“Quiero decir que aquí no hemos tenido gobiernos monocolor. Es más, el PNV tampoco ha estado siempre”, prosiguió en el debate televisiva bajo la atenta mirada de Martínez. “Por lo tanto, yo no dejaría de lado nada”, apuntó en relación al escenario que puede abrírsele a Podemos con vistas a formar gobierno tras el paso por las urnas, especialmente si se confirma la fulgurante irrupción en el Parlamento de Gasteiz que todas las encuestas le auguran. Biurrun reconoció que el mensaje lanzado desde el partido asambleario para dar carpetazo a que el PNV reedite su posición de mando en el Gobierno vasco no le parece el mensaje más idóneo, sabiendo cuál es el “recorrido” que los jeltzales han efectuado. “Eso hay que reconocérselo”, estimó.
“¿Por qué no acordar en base a un programa con el PNV o con EH Bildu como en estos momentos se quiere en España -por parte de Podemos- con el PSOE?”, se cuestionó ante las cámaras, habida cuenta de que la posibilidad de que Podemos uniera fuerzas -más probablemente con la izquierda aber-tzale que con los jeltzales- podría ser un escenario a analizar con detenimiento por parte de la dirección. Lo será, en todo caso, en base “al mapa que salga de las elecciones y las posibilidades que existan”. La magistrada, de la que los líderes de la formación morada en suelo vasco esperan que se presente al proceso de primarias del que saldrá su candidatura -y ayer el propio Martínez refrendó esa preferencia- cerró su intervención mostrando su “preocupación” por el mensaje que los responsables han lanzado a los cuatro vientos desde que las urnas de las elecciones generales del pasado diciembre les otorgaran la mayoría en la CAV.
dificultad de acuerdo Por su parte, Martínez quiso dejar “claro” que el mensaje sobre el desalojo del PNV de Ajuria Enea, una posibilidad que podría materializarse en caso de una entente entre fuerzas de izquierdas, “no es el que queremos trasladar, sino el que se ha entendido. Jamás hemos utilizado esa palabra. Procuramos no utilizarla”, respondió. Pero lejos de querer avivar el debate semántico, Biurrun le inquirió que al menos “en castellano habéis dicho quitar”, ante lo que el secretario de Organización de Podemos reconoció no ser la palabra más adecuada “democráticamente”. No obstante, y pese a reconocer la cintura mostrada por el PNV para “gobernar con cualquiera”, tampoco atisbó un viraje de 180 grados en la estrategia marcada desde la dirección.
En las instituciones en las que ocupan escaños la formación morada ha “constatado” la dificultad “de alcanzar acuerdos” con los jeltzales, incidió Martínez. “Es verdad que en algunos sitios sí que hemos podido hacerlo”, si bien el número tres de Podemos calificó como “muy difícil” poder tender puentes al entendimiento con un partido al que habitualmente suele ver “metido en su papel”. El electorado de la formación morada tampoco vería con buenos ojos realizar un camino compartido entre ambas formaciones, ya que “no es lo que quiere”, concluyó.
