donostia -Con un 81% de respaldo al documento base que el grupo promotor del proceso Abian presentó a las bases, el proceso de reflexión de la izquierda abertzale que concluirá a primeros de mayo continúa su camino. Entre este viernes y el martes se celebrarán las terceras y definitivas asambleas, que votarán las cinco enmiendas principales que en la anterior ronda de reuniones superaron el umbral del 5% de apoyo. Ninguna de ellas rectifica el rumbo general, sino que se centran en el papel que debe tener la desobediencia, la resolución del problema de los presos y, sobre todo, en cuestiones de organización interna.

La principal reside, según explicaron ayer los miembros del grupo promotor Oihana San Vicente e Igor Arroyo, en cuál será la relación que mantendrán las tres asociaciones que forman parte de la izquierda abertzale: Sortu, LAB y Ernai. Si la ponencia base quiere otorgar al partido político el liderazgo de la futura izquierda aber-tzale, hay quien propone un órgano colegiado entre los tres y, más aún, quien aboga por una izquierda abertzale de estructura mucho más amplia que la actual y que pase a tener cuatro organizaciones -las tres consabidas más otrapara la dinamización del Movimiento Popular- o incluso nueve.

La mayoría de estas ya ha operado en distintos momentos del MLNV. Así, a las actuales Sortu, LAB y Ernai, agregan una organización internacionalista, el sindicato estudiantil, una organización contra la represión, otra feminista, una asociación revolucionaria y el EPPK/EIPK.

Cinco enmiendas El grupo promotor se opone a esta propuesta ya que, mientras la ponencia general aboga por “compartir el proceso independentista transformador con amplios sectores de la sociedad”, la enmienda “prioriza a la unión de fuerzas y la organización interna de la izquierda abertzale”. Además de no verla práctica, cree que “no encaja con la actual realidad de Euskal Herria ni de la izquierda abertzale. Partir de un organismo para crear otros se dio en un contexto socioeconómico determinado, el de la década de los 70”. Las cinco enmiendas han superado el umbral del 5% de los militantes o el de 5% de las cerca de 280 asambleas que se han celebrado en otras tantas localidades y barrios, en el caso de las capitales, puesto que algunas se han presentado en varios lugares. En total han participado 4.783 personas. Ahora queda ver si el apoyo a las enmiendas, más allá del 5% necesario en un primer momento.

Sin llegar a ser rectificaciones que chocan con postulados de la ponencia oficial, los promotores se comprometieron a incluir “mejoras” centradas en materias como el euskera, la laicidad u OTAN, mientras que cuando el grupo promotor se disuelva, dejará temas pendientes.

Arroyo y San Vicente revelaron que esta especie de “informe de gestión” quedará en mano de las direcciones de las organizaciones. Serán Sortu, LAB y Ernai quienes deberán ir concretando y profundizando el proyecto político, la concepción de socialismo, la definición de la política internacional o el ecologismo, entre otros, tras un proceso que sobre todo habrá servido para “ordenar la casa” de la izquierda abertzale.

Con el 81% de apoyo a la tesis principal, Igor Arroyo subrayó que existe “un consenso y una cohesión muy importante”, lo que explica el respaldo a la tesis principal de llevar hasta el final la apuesta por la unilateralidad y también la necesidad compartida de “una nueva cultura y práctica política” de la izquierda abertzale.