BILBAO. Asimismo, ha defendido que los ayuntamientos vascos están, "con carácter general", en una situación económica "razonablemente saneada" fruto de una gestión "responsable liderada por diferentes gobiernos municipales de todo color".

En declaraciones a Onda Vasca, el presidente de Eudel, Imanol Landa, se ha referido también al acuerdo alcanzado entre PNV y EH Bildu para la renovación de Eudel que garantiza la presencia en sus órganos de gobierno de la coalición abertzale que, hasta ahora, estaba ausente y que ha calificado de "hito".

Tras indicar que Eudel es una asociación con 34 años de vida que ha recogido la "pluralidad y diversidad de los ayuntamientos" vascos, ha incidido en que "ahora refuerza esa realidad plural con la incorporación de la izquierda abertzale".

Landa ha recordado que la Asociación de Municipios Vascos tiene una "doble vertiente" en la que desarrolla su labor: una labor de "asesoramiento, acompañamiento y ayuda" a sus socios en el día a día, así como la de "ejercer de interlocutores ante el resto de las instituciones".

"Eudel es una herramienta que se pone más en valor en los ayuntamientos pequeños con poco personal que en Euskadi son los mayoritarios", ha indicado, para añadir que el 60 por ciento de los municipios vascos son de menos de 2.500 habitantes.

Preguntado por el proyecto de Ley Municipal, Landa ha mostrado su confianza en que la ley sea una realidad y, por ello, ha apelado a la "responsabilidad" de los partidos políticos para "hacer un último esfuerzo que desemboque en acuerdo antes del final de la legislatura".

"Nos encontramos ante una anomalía. No es lógico que todavía siga pendiente esta asignatura de reconocer el papel institucional de los ayuntamientos", ha lamentado.

En este sentido, ha recordado que el sistema institucional vasco está conformado por "instituciones comunes y forales" que están reconocidas, mientras que, por contra, falta "articular ese reconocimiento e interlocución de los gobiernos municipales ante las instituciones forales y comunes, y eso es la Ley Municipal".

"Somos el interlocutor natural ante la ciudadanía por ser la primera puerta que tocan cuando surgen problemas y, de manera natural, hemos tenido vocación expansiva para resolver los problemas de los vecinos. Hemos ido más allá de nuestro ámbito competencial natural y esto no puede seguir así. Ha de reconocerse nuestro ámbito de trabajo, las fórmulas y garantías para que la financiación sea la necesaria", ha subrayado.

En este contexto, ha remarcado que la Ley Municipal significa articular las fórmulas que garanticen una financiación necesaria para prestar servicios y otras fórmulas como "un órgano de alerta previa", gracias al cual los consistorios podrán "conocer y posicionarse ante cualquier proyecto legislativo que afecta a la gestión municipal".

"Es habitual encontramos con normativas de otras instituciones que afectan a nuestra gestión sin tener en consideración nuestro criterio. Ese órgano de alerta previa nos permitirá valorar esas iniciativas antes de ser aprobadas", ha expresado.

Asimismo, ha insistido en que el proyecto objeto de debate contempla una "cuestión nuclear" como es la presencia de los ayuntamientos vascos en el Consejo Vasco de Finanzas, "no solo con voz como estamos ahora, sino también con voto, lo que es un salto cualitativo importante".

RIESGO COMPARTIDO

Cuestionado por el incumplimiento de las previsiones de recaudación, Landa ha incidido en que el modelo de financiación vasco es un modelo de corresponsabilidad, de riesgo compartido entre todas las instituciones.

"Es un modelo que permite un grado de financiación muy superior a los ayuntamientos del resto del Estado del régimen general y que funciona razonablemente bien. Duplicamos la financiación del régimen general español", ha valorado.

Por último, ha remarcado que los ayuntamientos vascos están en una situación económica "razonablemente saneada con carácter general, fruto de una gestión responsable liderada por diferentes gobiernos municipales de todo color".

"Hay excepciones, pero la gestión realizada ha sido responsable y prudente. Tenemos que trabajar en clave de prudencia, santo y seña del municipalismo vasco", ha concluido.