gasteiz - El exsecretario general del PSE alavés, Txarli Prieto, declarará el próximo miércoles día 30 como imputado por dos presuntos delitos de estafa y falsedad documental ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV). Así lo recoge el auto difundido ayer por la Sala de lo Civil y Penal, una citación en la que también figura con idéntica imputación el exdirector de la Policía Nacional y actual secretario de Organización del PSE alavés, Víctor García Hidalgo.

La comparecencia de ambos en el banquillo de los acusados se producirá dos meses y medio después de que este tribunal admitiera a trámite las denuncias por su relación con una empresa de construcción que realizó diferentes trabajos de reforma en cinco sedes socialistas. El Tribunal deberá dilucidar si los imputados emitieron facturas al PSOE en nombre de la firma Escoiba por estas obras relacionadas, presuntamente, con la seguridad de las sedes.

En total, según recoge el auto judicial, se emitieron unas facturas de casi 50.000 euros. La investigación determinará si estos pagos se corresponden con los trabajos realizados o, por el contrario, si los imputados las emitieron para no perder las asignación que el PSOE anualmente aportaba para “sufragar gastos de seguridad” ante la amenaza de ETA.

Ante esta denuncia, Prieto reconoció en su día su vinculación con la empresa Escoiba, de la que fue copropietario entre 1992 y 2012, y recordó que su incursión en la política profesional se produjo con su incorporación al Parlamento Vasco, tras los comicios autonómicos de 2009, lo que supuso “un pequeño tiempo de solapamiento” de ambas actividades, según asumió. No obstante su participación activa en la política nace años atrás, una etapa que incluye sus nueve años (2005-2014) al frente del partido en Álava.

Tras conocerse la imputación, Prieto alegó que Escoiba era la empresa “de urgencia y confianza” a la que su partido recurrió durante 15 años ante los ataques terroristas, una versión corroborada por la secretaria general del PSE, Idoia Mendia, quien defendió la inocencia de sus dos compañeros de partido.

Los socialista recordaron ayer que no se personarán en este causa cuyo origen fue una denuncia anónima.