Barcelona - La CUP hará “todo lo posible” para evitar que Artur Mas sea president tras el 27-S, al considerar a CDC como un “lastre” para el independentismo, si bien no hará nada que haga “descarrilar” el proceso. Así lo aseguró ayer Antonio Baños, que propuso que el próximo president sea alguien “de consenso”. En todo caso, el candidato independentista entiende que en Catalunya no hay un “régimen presidencial” y que, por tanto, el nombre del futuro presidente de la Generalitat “no es decisivo” e incluso “es irrelevante”.

El candidato de la CUP indicó ayer que su partido “está entre dos topes”. “Haremos todo lo posible para que Artur Mas no sea president, pero también que nadie dude de que nunca haremos ni parar ni descarrilar el proceso hacia la independencia, al contrario, somos el acelerador”, señaló. En todo caso, Baños cree que, si después del día 27 se forma un gobierno de concentración, quien lo presida debería ser “un nombre de consenso”, para lo cual “sería lógico que, si en un extremo ideológico está Mas y en el otro nosotros, busquemos en medio un espacio donde todas las fuerzas políticas se puedan sentir cómodas”. A partir de ahí sugirió “una figura de prestigio, no política o procedente de la política no partidaria”.

En opinión de Baños, CDC es un “lastre” para el proceso, un partido con “sombras”, tanto por su forma de gobernar “autonomista” a lo largo de tres décadas, como por los casos de presunta corrupción en los que se ha visto envuelto, según indicó. El periodista catalán afirmó que las relaciones entre su formación y los convergentes no “son nada cordiales y amables, ni lo podrían ser”, porque para ellos “Convergència es el partido de la gestión de la autonomía, de las oligarquías insensibles”. En esta línea argumental, Baños indicó que para su partido CDC representa el típico partido “clientelar, que se dedica al business friendly, a gestionar la pasta que viene y que va”. - Efe