Bilbao - En un contexto en el que la división política en relación a las víctimas aún no ha sido superada, 15 familiares de asesinados por el terrorismo y la violencia de distinto signo dieron ayer un paso al frente. Este colectivo solicitó a los partidos que eviten “apropiarse de su dolor”, al tiempo que les reclamó “acordar unos mínimos comunes de entendimiento” y reconocer que la “violencia está mal hoy y en el pasado”. Su mensaje también se dirigió a la sociedad para pedirle que “no olvide las décadas de terrorismo y violencia”. Además, se comprometieron a seguir desarrollando un trabajo, que demuestra que “se puede llegar a convivir”.

En un acto en la sede del Instituto de la Memoria Gogora, estas víctimas leyeron un posicionamiento compartido, llamado Eraikiz (construyendo), que se presenta como un primer paso conjunto elaborado tras un importante esfuerzo colectivo. Su objetivo es seguir con esta labor de reflexión y el próximo miércoles estarán en el Parlamento Vasco. De las 15 personas presentes en el acto, 12 son familiares de asesinados por ETA y las tres restantes lo son de asesinados por los GAL, la Policía y el régimen franquista. Con una puesta en escena muy cuidada y la melodía de fondo de Sustraiak han dituenak de Laboa, las víctimas comenzaron el acto presentándose. “Somos un grupo plural, diverso, que ha decidido compartir reflexiones, vivencias y experiencias del dolor que hemos sufrido, con un ánimo restaurador y constructivo. Muchos participamos en el programa Adi-adian”, adelantó Ibai Korta, hijo del empresario Joxe Mari Korta.

A partir de ahí, este grupo plural de víctimas se refirió a los principios que sostienen este proyecto, la aportación que entienden que pueden realizar, así como los emplazamientos que dirigen a la sociedad, los medios de comunicación y los políticos. Apenas dos días después de que el informe de expertos independientes sobre el Plan de Paz y Convivencia llamase la atención sobre la rémora que suponen las disputas partidistas para los avances en este sentido, este colectivo dio otro toque de atención a los grupos políticos. “Pedimos que se establezca un diálogo respetuoso y sereno; que no dilaten en el tiempo el necesario debate pendiente sobre convivencia. Es incomprensible que no haya un espacio de encuentro para debatir y acordar unos mínimos comunes de entendimiento”, señalaron, al tiempo que pidieron que activen “una Ponencia de Paz y Convivencia o algún espacio similar en el Parlamento Vasco”.

En su documento también solicitaron a “todos los partidos” que reconozcan “a todas las víctimas sin discriminaciones de ningún tipo”. “Las víctimas somos plurales y no somos patrimonio de nadie”, agregaron. Además, en su interpelación a los grupos políticos también indicaron que “es necesaria la autocrítica de quienes justificaron la violencia”, así como un impulso a campañas públicas para deslegitimar la violencia.

A través del documento Eraikiz, este colectivo también solicitó a la sociedad que “haga autocrítica de la que fue su actuación en el pasado” y que “rechaze claramente la violencia y cualquier tipo de justificación. “Que no la contextualice. No hay violencias buenas y malas. Que no cometa la injusticia de idolatrar o ensalzar a quienes ejercen o han ejercido la violencia”, indicó Josu Elespe, hijo de Froilán Elespe. En sus alusiones a la sociedad vasca, pidieron igualmente que “no tenga prejuicios y reconozca la pluralidad de las víctimas”. “Le pedimos que no minimice nuestras opiniones pensando erróneamente que funcionamos cegados por el dolor, pero que tampoco nos haga acreedores inmerecidos de la verdad o de la razón”, solicitó Iñaki García Arrizabalaga, hijo de José Manuel García.

Finalmente, solicitaron a los medios de comunicación que desarrollen “un papel activo en la preservación de la memoria de las víctimas”. Una memoria que visiblemente emocionados reivindicaron ayer y que continuarán reclamando en el futuro.

Las víctimas. Participan 12 víctimas de ETA: Carlota Arguimberri, sobrina del conductor de autobús Carlos Arguimbarri; Marta y Sara Buesa, hijas del socialista Fernando Buesa; Josu Elespe, hijo del socialista Froilán Elespe; Iñaki García Arrizabalaga, hijo del delegado de Telefónica José Manuel García; José Goikoetxea, hijo del ertzaina Joseba Goikoetxea; Josemi Gómez Elosegi, hermano de Francisco Gómez Elosegi, psicólogo de Martutene; Nagore González, hija del secretario de ayuntamiento Manuel Vicente González; Mari Carmen Hernández, viuda del ‘popular’ Jesús Mari Padrosa; Andoitz e Ibai Korta, hijos de Joxe Mari Korta; y Dori Monasterio, hija del taxista Fermín Monasterio. Además, participan Ines Núnez de la Parte, hija de Francisco Javier Núñez de la Parte, asesinado por la Policía; Pili Zabala, hermana de Joxi Zabala, víctima de los GAL; y Mikel Paredes, hermano de Txiki, fusilado por el franquismo.