“Nos hemos encontrado para compartir objetivos, promover una política memorial desde todas las instituciones, recordar y reconocer a las víctimas con nombre y apellidos, de un modo personal y personalizado”. Esta afirmación del lehendakari Urkullu recogió el espíritu del encuentro celebrado ayer con alcaldes del PNV, PSE y EH Bildu, en el que ediles de cada partido compartieron con el resto las experiencias en materia de memoria y víctimas llevadas a cabo en sus feudos.

El socialista José Antonio Santano recordó que en Irun, municipio del que es alcalde, han sido asesinadas 31 personas -27 por ETA, dos por el BVE, una por abusos policiales y otra de autoría confusa-. Explicó que en 2003 se colocó un monolito de reconocimiento a todas ellas y que “desde entonces todos los años hemos recordado el sufrimiento injusto padecido por muchos de nuestros ciudadanos”. El primer edil de Bilbao, Juan Mari Aburto (PNV), enumeró la plaza en memoria del ertzaina Txema Aguirre o la calle dedicada al jurista Jose Mari Lidón, junto a las esculturas en homenaje a las víctimas del terrorismo, la dictadura franquista o la Guerra Civil. Además, desde 2010 “celebramos de forma unitaria el Día de la Memoria”. Por su parte, Julen Mendoza, alcalde de Errenteria (EH Bildu), relató que estas iniciativas empezaron en 2013 con un “espacio de reflexión” en el que participaron 300 personas que compartieron “relatos muy diferentes”. Las aportaciones continuaron durante el diálogo celebrado a puerta cerrada, por ejemplo con la alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, al tiempo que se realizaron consultas sobre la organización de homenajes.