iruñea - Cuando entre en el Gobierno navarro, Manu Ayerdi deberá soltar las riendas del PNV del territorio. El todavía presidente del Napar Buru Batzar formará parte del gabinete del cambio de Uxue Barkos y, en concreto, ocupará una de las dos vicepresidencias, la de carácter económico. Barkos tomará posesión de su cargo mañana, y un día después lo harán los miembros de su gobierno, entre los que se encuentra Ayerdi. Fuentes de Sabin Etxea consultadas por este periódico recuerdan que, con la ley en la mano, sería compatible que Ayerdi liderara el partido en Nafarroa y al mismo tiempo participara en el gobierno del territorio, pero puntualizan que es el propio PNV el que se autoimpuso limitaciones en sus estatutos para no poder ostentar ambos cargos a la vez. En cualquier caso, el cese tampoco tendría por qué producirse con carácter inmediato, sino que se dispone de un colchón de quince días para abandonar la ejecutiva. Aun así, Ayerdi no apurará el plazo y, según las mismas fuentes, nada más jurar el cargo cesará como presidente del PNV navarro, el jueves o el viernes a más tardar. Lo sustituirá Unai Hualde.

La elección no tiene demasiado misterio ya que, por norma, cuando debe reemplazarse a un presidente de ejecutiva en el partido, lo sustituye el secretario de manera provisional. En este caso, ese cargo lo ocupa Hualde. En cualquier caso, en esta ocasión el cargo no será tan provisional: lo seguirá ocupando hasta marzo, cuando se emprenda la renovación de las ejecutivas territoriales que correspondía por calendario de manera natural. El partido no ve sentido a abrir un proceso de elección de un nuevo presidente para su cúpula navarra cuando se encuentra a unos meses de emprender de todos modos su renovación porque le corresponde por calendario, al margen de los movimientos de los últimos días, que también han afectado a varios cargos a nivel nacional. Hualde ha sido alcalde de Altsasu y ha sido proclamado vicepresidente primero de la Mesa del Parlamento navarro.

En la ejecutiva nacional, los retoques también han sido mínimos. La secretaria del EBB, Pilar García de Salazar, y las burukides Nekane Alonso y Lorea Bilbao dejaron sus puestos para trabajar en la Diputación de Araba, el ayuntamiento de Bilbao y la Diputación de Bizkaia, respectivamente. Lo más probable es que no se cubran sus vacantes con nuevos burukides. La decisión, en cualquier caso, la tomará la Asamblea Nacional, que se reunirá en septiembre para dar luz verde a las listas electorales del Congreso y el Senado.