madrid - Santiago Arrozpide Sarasola, Santi Potros, volvió a pedir ayer su puesta en libertad con motivo del juicio que la Audiencia Nacional celebra contra él por atentar contra una patrulla de la Guardia Civil en abril de 1987. El histórico miembro de ETA ya hizo este alegato en mayo durante el juicio por el atentado frustrado del ex fiscal general del Estado Luis Antonio Burón Barba, por el que resultó condenado a 17 años de prisión por ordenar su asesinato. “Pido mi libertad y no voy a declarar”, afirmó entonces.
Santi Potros viene repitiendo el mismo discurso desde su detención el pasado 20 de enero, cuarenta días después de que la Audiencia Nacional le dejara en libertad de acuerdo a una normativa europea de acumulación de penas -fue arrestado en Francia en 1987 y luego extraditado a España tras cumplir varios años de cárcel en el país galo-.
El revuelo político y mediático causado por su excarcelación en diciembre provocó que la Policía le detuviera en Lasarte por su implicación en el intento de asesinato del ex fiscal general y por el atentado que ayer le volvió a sentar en el banquillo. Estos dos procedimientos justificaron su prisión provisional por riesgo de fuga después de que el Tribunal Supremo decidiera no descontarle la pena cumplida en Francia.
En el juicio de ayer, Santi Potros, que fue defendido por el diputado de Amaiur Iker Urbina, reiteró que debería estar en libertad y se negó a responder a las preguntas de la fiscal y de la abogada de la AVT. El preso acogido a la vía Nanclares Caride Simón, condenado por los hechos que se juzgaban ayer, reconoció que se comunicaba a través de notas manuscritas con la dirección de ETA en Francia, aunque evitó incriminar a Arrozpide Sarasola como el responsable de las órdenes de atentar contra las Fuerzas de Seguridad.
Por su parte, Domingo Troitiño y Mercedes Ernaga dijeron no recordar quién fue el jefe de la banda que ordenó el atentado del 2 de abril de 1987, que causó la muerte de un hombre que se encontraba en el interior de una cabina telefónica y heridas de gravedad a dos guardias civiles. El juicio se reanudará el 16 de julio con la declaración de un policía francés al que no se le ha podido notificar su citación y con la exposición de las conclusiones finales de las partes. - DNA