GASTEIZ - Iñigo Urkullu defendió ayer que las víctimas del terrorismo representan para el Gobierno Vasco “una prioridad y un compromiso”, y criticó que UPyD las utilice “de forma partidaria y arrojadiza” contraponiendo el trabajo que realizan con ellas con otros encuentros, como el celebrado por Jonan Fernández con el preso Rafa Díez Usabiaga o con el mantenido con Etxerat, ya que el lehendakari cree que “dialogar deslegitima el terrorismo”. Mientras el líder magenta, Gorka Maneiro, los calificó de “inaceptables” porque estas personas “siguen sin condenar a ETA y justificando las actividades criminales de la banda”; Urkullu hizo referencia al Plan de Paz y Convivencia del Gobierno Vasco, así como a los programas Hitzeman para la inserción de los presos y Zuzenbidea, para responder a UPyD que en ellos se integra “todo lo que usted dice que no hemos reclamado a las personas con las que nos hemos reunido”.

Además, acusó a Maneiro de volver a recurrir al “manido latiguillo de que nos importan los presos más que las víctimas”, algo que se trata de una “falacia” que “hace daño a las víctimas, ya que les envía el mensaje de que no importan, lo que solo genera dolor en ellas”. “En política, señor Maneiro, no todo vale”, subrayó Urkullu, para quien emplear “a las víctimas de forma partidaria y arrojadiza, además de vergonzoso, es un factor de revictimización”, por lo que reclamó al parlamentario de UPyD que “contribuya a sacar a las víctimas de la contienda partidaria”.

Además, evocó que el Gobierno Vasco ha hecho público un documento en el que recoge la relación que ha mantenido con las víctimas durante esta legislatura, en el que “se puede comprobar que ningún ámbito de la gestión de la Secretaría para la Paz y la Convivencia, ocupa tanto esfuerzo, tanta dedicación, actividad y tanto personal”. “Las víctimas representan para el Gobierno Vasco, para este y los anteriores, una prioridad y un compromiso”, reiteró el jeltzale, quien afirmó que Díez Usabiaga “se ha caracterizado también por defender el diálogo para la resolución de un problema de convivencia, y por una apuesta que la izquierda abertzale debería dar”. Por ello, cuestionó a Maneiro por el planteamiento que tiene la líder de UPyD Rosa Díez en relación al concepto de final dialogado de la violencia, recordándole que la actual dirigente de la formación magenta, formó parte del Ejecutivo que “aprobó el final dialogado de la violencia”.

Asimismo, Urkullu defendió que en un Estado democrático, visitar a un preso es una actividad normal, legal y constitucional. “La visita se sitúa en un marco de normalidad y legalidad; lo anormal es no dialogar”, precisó antes de reconocer que el diálogo no resuelve los problemas por sí mismo “pero lo facilita”. Por último, incidió en que dialogar “deslegitima” el terrorismo, razonamiento que cree que no entiende UPyD, por lo que puso como ejemplo las noticias de diálogo en conflictos como el de Irán o el de Cuba para afirmar que “también nuestra sociedad necesita mucho diálogo”.

plan de paz El lehendakari contestó a una pregunta del socialista Rodolfo Ares sobre la ejecución del Plan de Paz que, a juicio del PSE, presenta un balance “decepcionante”. El jeltzale le recordó que los informes de seguimiento del Plan indican que el documento se desarrolla con un “grado satisfactorio”, puntualizando que las palabras asesinato, extorsión o secuestro no están incluidas como tampoco lo están en el texto del denominado suelo ético, que en la pasada legislatura contó con el apoyo del PSE. - E. P.