bilbao - El PNV celebrará este domingo el Aberri Eguna, Día de la Patria Vasca, inevitablemente condicionado por la proximidad de las elecciones municipales y forales del 24 de mayo, y concediendo todo el protagonismo a los ayuntamientos. Los jeltzales, que ya gobiernan en 94 alcaldías, se presentarán a las elecciones proyectando una imagen de fuerza y cohesión interna, ya que han presentado listas en 233 de los 251 municipios de la CAV -en algunos casos se han apartado para dar paso a candidaturas ciudadanas-; han podido incluso sellar un acuerdo para coaligarse con quien era su rival en Gernika, el alcalde José María Gorroño, de EA; y han elaborado sus listas sin desangrarse en luchas internas y sin las disputas públicas que sí han tenido lugar en el PP y el PSE. Además, consideran que tienen las encuestas de cara, ya que parecen tener amarrada Bizkaia y la pelea se presenta muy reñida en Gipuzkoa y Araba, donde tienen firmes opciones de hacerse con el liderazgo. En Nafarroa, esperan que llegue un cambio en el que Geroa Bai está llamada a desempeñar un papel central. En ese contexto, el protagonismo del Aberri Eguna lo tendrán los municipios bajo el lema Herriz, herri, aberri!, aunque no es solo un guiño a los comicios, sino también una señal de cómo entiende el partido la construcción nacional vasca y el autogobierno, como el fruto de la gestión del día a día. El Aberri Eguna de este año, que ya acostumbra a ser una jornada de simbolismo y reivindicación aber-tzale, llega en esta ocasión a las puertas de que el Parlamento Vasco comience a perfilar el articulado del nuevo estatus de autogobierno. Y es ahí donde cobran mayor relevancia los criterios que apuntó ayer el partido en el manifiesto del Aberri Eguna, donde ratificó su apuesta por una relación de igual a igual con el Estado y por activar mecanismos para que, cuando Madrid invada una competencia vasca, no tenga una posición preponderante ni se salga siempre con la suya. El nuevo articulado debería someterse a votación entre la ciudadanía.
Tras acoger los testimonios de los expertos convocados por los partidos, la ponencia parlamentaria entrará en fase de conclusiones tras las elecciones, y será entonces cuando los grupos pongan sobre la mesa sus propuestas. El manifiesto del PNV sobre el Aberri Eguna apuesta por el reconocimiento nacional de Euskadi, el pacto entre iguales en lugar de la subordinación al Estado, la bilateralidad efectiva con el establecimiento de mecanismos de arbitraje compensados para resolver las invasiones competenciales, e institucionalizar el derecho a decidir para que la ciudadanía avale el texto que apruebe el Parlamento y las modificaciones que pudieran darse en el futuro.
modelos que rechaza Los jeltzales dejan claro qué modelos no contarán con su apoyo: los intentos recentralizadores -ahí se enmarcan las invasiones de competencias vascas por parte del Estado, que ha exigido recortes en materias que competen a Euskadi como el copago sanitario o los ajustes en el salario de los funcionarios-, y el federalismo simétrico -el socialismo apuesta por el modelo federal, pero el PNV no tiene claro si quiere que sea asimétrico y que respete la singularidad vasca, o que sea simétrico, es decir, que prevea las mismas competencias para todos-. “Ni las tentativas recentralizadoras que amenazan nuestro statu quo actual ni las pretensiones federalizantes homogeneizadoras que algunos diseñan en ese cambio de modelo institucional que comienza a dibujarse en España contarán con nuestra aprobación. Al contrario, nos tendrán enfrente”, zanja el manifiesto. El PNV deposita el debate en el Parlamento y enfatiza su perfil pactista. El lehendakari rechazó semanas atrás la vía unilateral de la izquierda abertzale al entender que aboca a una desobediencia que tampoco EH Bildu predica allá donde gobierna.
La presidenta de la Ejecutiva vizcaina del PNV, Itxaso Atutxa, y el burukide Joseba Aurrekoetxea, responsable del Área Institucional del EBB, presentaron ayer los preparativos de la fiesta y las claves del manifiesto. La celebración tendrá lugar el domingo en la Plaza Nueva de Bilbao a partir de las 11.30 horas y acogerá los discursos del lehendakari; del líder del partido, Andoni Ortuzar; y de la responsable de las juventudes jeltzales, Diana González. Atutxa opinó que este año marcará el inicio de “un ciclo decisivo para el futuro de la nación vasca” porque se asentará el crecimiento económico, tendrán lugar varias citas electorales, y en la CAV se comenzará a dar forma al nuevo estatus.
El PNV llama a gestionar los tiempos con inteligencia porque las elecciones generales de finales de año podrían abrir nuevos escenarios que “allanen o dificulten” las pretensiones de avanzar en materia de autogobierno, ya que no será lo mismo intentar negociar un nuevo estatus con un Gobierno español con mayoría absoluta que en minoría, sobre todo si se trata de un PP que no se plantea hacer concesiones a Euskadi. Sobre el cambio en Nafarroa, esperan que se conforme un gobierno que propicie un acercamiento a la CAV. Aunque el PNV cree que ambos territorios forman parte de un único pueblo, respeta “el derecho inalienable de los navarros a decidir por sí mismos su porvenir”. El partido avisa de que “no cejará en su empeño hasta que Euskadi alcance su plenitud como nación en Europa y en el mundo”, pero tampoco desdeña los logros alcanzados en materia de autogobierno hasta la fecha, entre otras cuestiones porque han abonado el bienestar de Euskadi. Aun así, no pierde de vista su apuesta por que Euskadi sea reconocida como una nación más en Europa. “Que se respete la voluntad de su ciudadanía y que fruto de la misma pueda articular su organización institucional y jurídica, en el marco del principio internacional del derecho a la libre autodeterminación de los pueblos”, aspira.
En materia de paz, pide pasos unilaterales y superar el bloqueo. Cuando cicatrice el pasado, el futuro “de la patria vasca será mucho más abierto”. En la celebración, rendirá homenaje a los municipios y también a su fundador, Sabino Arana Goiri, de cuyo nacimiento se cumplen 150 años. Ambos tributos se han fusionado en un vídeo. La fiesta se trasladará a mediodía hasta El Arenal, donde 1.100 personas compartirán mesa.