madrid - Rajoy evitó la autocrítica. Un día después de la derrota electoral en Andalucía, el presidente del Gobierno rechazó extrapolar los resultados de los comicios del domingo con los que pueda conseguir el PP en el conjunto de España y siguió augurando una victoria de su partido en las municipales y autonómicas de mayo. Rajoy analizó los resultados electorales en una reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP a la que no asistieron numerosos barones regionales -la foto de la derrota no era rentable políticamente tras la debacle popular- y en la que el jefe del Ejecutivo dio su apoyo explícito al candidato a la Junta, Juanma Moreno, elogió su campaña y, lejos de animarle a dimitir, sorprendió al afirmar que tiene una gran proyección de futuro.

Pese a admitir que los resultados -el PP ha perdido 17 escaños y medio millón de votos con respecto a las autonómicas- no han sido los que esperaba, el presidente optó por resaltar ante los dirigentes del partido algunos datos positivos como que los populares han recuperado 300.000 votos con respecto a las europeas o que siguen siendo primera fuerza en cinco capitales andaluzas. Además, insistió en su convencimiento de que el PP será la primera fuerza política en España en la próxima cita electoral, las autonómicas y municipales del 24 de mayo, y llamó a los suyos a “ponerse las pilas”, según fuentes presentes en la reunión.

“Ni ha perdido Rajoy ni ha ganado Pedro Sánchez”. Éste ha sido el análisis, del vicesecretario general de Organización, Carlos Floriano, quien aseguró que su partido sí ha hecho autocrítica ante los resultados, como hace “permanentemente”. “Si fuéramos perfectos creo que seríamos de izquierdas”, ironizó. Entiende Floriano que los partidos con responsabilidades de Gobierno, como el PP, “no lo tienen fácil” ante las convocatorias electorales, pero igual que Rajoy insistió en que no se pueden trasladar los resultados de Andalucía al resto del país. Admitió, por otro lado, que el PSOE no ha sufrido tanto castigo como los populares. “El electorado del PSOE en Andalucía parece que no castiga la corrupción”, lamentó.

Además de ser el encargado de comparecer, Floriano fue uno de los que tomó la palabra ante el Comité, al igual que Rajoy y Juanma Moreno, quien aseguró que su partido hará una oposición “exigente” y anunció que trasladará a las otras formaciones con representación parlamentaria una propuesta para aprobar una comisión de investigación sobre los fondos de formación. No reclamó la palabra la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, quien no obstante, según fuentes presentes en la reunión, dijo ante varios dirigentes del partido que Moreno debería dimitir ante los malos resultados, y más tarde, en una entrevista, señaló que Juanma Moreno “no ha sido capaz de superar el estigma de su nombramiento a dedo”. Una apreciación que varios dirigentes reprocharon a la veterana dirigente y candidata a la Alcaldía de la capital, recordando además que también ella ha sido elegida a dedo por Rajoy para luchar por el Ayuntamiento madrileño en los próximos comicios de mayo.

Fueron muy pocos los barones que acudieron a la sede de Génova, tampoco fueron numerosas las declaraciones a la entrada y a la salida de la reunión. Entre los que hablaron estaba la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, quien sostuvo que el partido debe hacer más “autocrítica”, explicarse “mejor” sobre su gestión y trabajar “duro” ante la cita con las urnas en mayo. También fue autocrítico el presidente del Congreso, Jesús Posada, para quien el PP ha sufrido un “correctivo” y además avisó de que Podemos y Ciudadanos han venido “para quedarse”.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, fue el más contundente al afirmar que el resultado no ha sido un fracaso de Rajoy, pero sí admitió que ha sido “mucho peor, infinitamente peor, del que podía esperar” el PP. “Ha habido que apretarse el cinturón en materia presupuestaria y eso quiere decir que el Estado presta menos servicios (...) ha habido que hacer una reforma del sistema financiero y durante muchos años no ha habido crédito, y ha habido que hacer reformas estructurales que han tocado nervios muy sensibles. Y entonces la gente no te vota”, interpretó.