Madrid - “Rajoy dice que él los ha nombrado siempre en marzo, pues será marzo su momento. No lo sé”. Así, entre ansiosa y resignada, se pronunció ayer Esperanza Aguirre, posible aspirante a la Alcadía madrileña, sobre la designación de candidatos del PP para las elecciones de mayo a falta de conocer los nombres estrella para la Comunidad de Madrid y la de Valencia. Lo hizo tras la reunión que mantuvo el Comité Ejecutivo Nacional, y donde el presidente español mandó a sus dirigentes un mensaje triunfalista sustentado en los sondeos que maneja y que le otorgarían el triunfo en la mayor parte de territorios mientras Podemos perdería “fuerza”.

“Espero cerrar lo importante tranquilamente. Ya vemos lo que les está ocurriendo a otros”, aseguró el líder del PP en clara alusión a lo que acontece en el PSOE tras la crisis en la federación madrileña y la destitución de Tomás Gómez. Palabras que repiten el mensaje que trasladó desde Bruselas el pasado jueves con un “o terminamos [la elección de] todos en febrero, o no”. Fue el vicesecretario de Organización del PP, Carlos Floriano, el encargado de clarificar el escenario electoral en base a los sondeos del partido, liderados por el PP, con la formación de Pablo Iglesias en segundo lugar perdiendo fuelle, y el PSOE tercero. “En las encuestas se refleja que el crecimiento de Podemos se ha detenido. Es más, está cayendo”, zanjó. Sin embargo, la última que se conoce, aireada ayer por la Cadena Ser, daba a Podemos un 24,6% en intención de voto de cara a las generales, frente al 22,5% de los populares y el 19,5% de los socialistas. Ciudadanos pasaría en un mes del 5% al 13,4% de apoyo.

Rajoy les repasó asimismo una serie de datos económicos, entre ellos el índice de confianza del consumidor, para subrayar que la realidad se le pone cada vez más difícil a “los agoreros” y a aquellos que hacen discursos “catastrofistas”, ya que los ciudadanos perciben que la situación económica va mejor. “Nos presentamos a las elecciones en una situación de tirón económico y social”, manifestó el presidente en esa reunión, insistiendo en que tienen razones y datos para saber que la percepción de la calle va mejorando y que eso les ayudará en las próximas citas electorales.

El líder del PP les conminó igualmente a acudir “a todos los sitios de Andalucía desde los pequeños pueblos a las grandes capitales”, ya que es el feudo donde tienen más complejo conseguir la victoria, y más con un candidato poco conocido entre la ciudadanía andaluza. Nuevamente, criticó que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, haya convocado los comicios “cuando no tocan” y no los haya hecho coincidir con las municipales de mayo para haber ahorrado a las arcas públicas 14 millones. Varios barones faltaron a la cita de Génova, entre ellos, el gallego Alberto Núñez Feijóo, el extremeño José Antonio Monago o el candidato andaluz Juan Manuel Moreno, y tras los discursos ninguno de los cien asistentes pidió la palabra.