BARCELONA - El exfiscal José María Mena, encargado junto con el exfiscal Carlos Giménez Villarejo de investigar el caso Banca Catalana, explicó ayer que “el vaciamiento patrimonial llevado a cabo por los querellados en la causa -entre los que se encontraba el expresident Jordi Pujol- llevó a Banca Catalana a un fatídico final”. El exfiscal compareció en la comisión del fraude, evasión fiscal y la corrupción del Parlament, para dar cuenta del progresivo vaciamiento de fondos por parte de los directivos de Banca Catalana que, pese a sus pérdidas, se repartieron beneficios “acelerando la grave crisis” que sufría la entidad.
Mena dijo que presentaron un escrito ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) en la que se mostraban indicios de delitos de apropiación indebida, falsedad en documento público y mercantil, y maquinación para alterar el precio de las cosas contra 18 de los exconsejeros del banco, entre los que se contaba Pujol. El Tribunal sobreseyó el caso con el voto de la mayoría de los magistrados, 33 de 41. Mena reveló la existencia de cajas B, unas de entidades instrumentales y otras vinculadas a los querellados. - E.P.