gasteiz - El Gabinete presidido por Iñigo Urkullu defiende la supresión de medidas excepcionales en la legislación penitenciaria para los presos de ETA, una visión que coincide con los postulados que el lunes desgranó el presidente de Francia, François Hollande, tras el encuentro que mantuvo con su homólogo español, Mariano Rajoy.

En opinión del portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, la ausencia de medidas excepcionales como la dispersión, además de ser “lógica” supondría una consecuencia directa del marco normativo continental, donde queda patente tras los últimos acuerdos que debe prevalecer el reconocimiento mutuo de condenas entre los países miembros de la UE. De esta forma, recordó que los miembros de la banda armada que cumplen sus respectivas penas en las cárceles franceses disfrutan del mismo régimen legislativo que se aplica al resto de presos en territorio galo.

Erkoreka admitió que el Ejecutivo autonómico no dispone de información adicional sobre los pormenores del encuentro que protagonizaron los dos mandatarios en París, pero insistió en que tras la reforma legislativa estatal que han propiciado las disposiciones comunitarias la realidad es que “la ley está en vigor” y su consecuencia directa debe ser el escenario dibujado por Lakua, siempre que no existen causas excepcionales que determinen actuar de otra manera.

Ante las preguntas de los periodistas sobre el papel ejercido por Rajoy en el encuentro parisino, el portavoz del Gobierno Vasco admitió que desde este gabinete echaron en falta una intervención en los mismos términos por parte del presidente del Ejecutivo español. En opinión de Erkoreka, estas declaraciones hubieran sido “buenas para la transparencia y la información de los ciudadanos”.

eh bildu Además de la valoración del Gobierno Vasco sobre la cumbre franco-española, desde EH Bildu también se hicieron ayer eco del encuentro del lunes y destacaron que cualquier política penitenciaria que pacten Madrid y París “debe significar el fin de la dispersión”.

Así lo expresó el portavoz de la coalición soberanista en este ámbito, Julen Arzuaga, a través de un comunicado en el que puso de manifiesto la posición contraria de su grupo parlamentario ante la política penitenciaria “de excepción”.

En opinión de Arzuaga, esta práctica esconde medidas “de chantaje y venganza” con las que es “necesario acabar” para iniciar un “itinerario democrático” que permita a los presos de la banda armada cumplir sus condenas en Euskadi. Al igual que Erkoreka, el parlamentario vasco también hizo alusión al marco normativo europeo que “apuntala el derecho de la persona presa a estar en su entorno social y familiar” mientras cumple condena. - A. Abaitua