madrid - La Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional se reunirá esta mañana para decidir sobre la puesta en libertad de Carmen Gisasola tras la liquidación de su condena en España una vez descontada la pena cumplida en las cárceles francesas. Fuentes de su defensa y de la familia confirmaron ayer a este diario que la presa de Markina podría durante la tarde de hoy mismo salir definitivamente de la cárcel de Zaballa, donde cumple condena desde 2001, fecha en la que fue extraditada de Francia.

La Sala de la Audiencia Nacional tiene ya sobre su mesa la liquidación de pena de Gisasola en la que se acredita que la suma del tiempo de prisión en Francia y España completa, e incluso supera, la condena total que los jueces le impusieron por la comisión de varios atentados, entre ellos tres asesinatos, cuando era miembro y dirigente de ETA en los años ochenta. En ese cómputo se recogen los cuatro de prisión provisional que el Tribunal Supremo le descontó el año pasado, así como la anulación de la doctrina Parot.

Tras estimar la petición de Gisasola, el pasado octubre la Audiencia Nacional reclamó a la dirección de la cárcel de Zaballa el recálculo de la liquidación de su condena. Con esa nueva contabilidad, la Sala no tiene otra opción que decretar su excarcelación, lo que se espera que pueda hacerse hoy, aunque para ello es preciso la firma del fiscal del caso, Jesús Alonso. Fuentes de la defensa aclaran, sin embargo, que el criterio del fiscal no vincula a la Sala, por lo que incluso una eventual oposición de aquél no podría impedir la puesta en libertad de la todavía reclusa, aunque sí retrasarla.

Junto a Joseba Urrosolo Sistiaga, también preso en la cárcel de Zaballa, Gisasola es uno de los referentes de la denominada vía Nanclares que agrupa a los presos críticos en su momento con ETA y la estrategia violenta. En este grupo también se incluyen otros miembros significados que abandonaron la organización armada o fueron expulsados de ella como Kepa Pikabea, José Luis Alvarez Santacristina, Andoni Alza, Rafael Caride, Valentín Lasarte o Idoia López Riaño. Algunos de ellos ya han salido de la cárcel por la liquidación de su pena o en aplicación de la doctrina Parot.

Hasta ahora, cuando un preso cumplía pena en Francia y era extraditado más tarde a España, la Justicia ponía a cero el contador y no tenía en cuenta los años de cárcel pasados al otro lado de la muga. Sin embargo, la Unión Europea aprobó una decisión marco en 2008 para obligar a los estados a descontar los años cumplidos en otros países comunitarios. Fue en marzo de este año cuando la Justicia española tomó nota por primera vez de ese mandato europeo. El Tribunal Supremo estimó parcialmente un recurso de Joseba Urrosolo Sistiaga, en el que reclamaba a los jueces que le descontaran la pena cumplida en Francia, aunque en su caso el visto bueno del tribunal no conducirá a su excarcelación inmediata porque aun restándole los años cumplidos en suelo francés todavía le quedan cerca de dos años de condena.

El caso de Gisasola puede ser el primero de una larga lista de presos tanto de la vía Nanclares -Josu García Corporales y Rafael Caride tienen muy avanzados los trámites- como del colectivo oficial de presos de ETA que pueden ser excarcelados como consecuencia del doble cómputo de las penas de quienes han purgado en cárceles de otros países europeos.