BARCELONA. En declaraciones a Rac1 recogidas por Europa Press, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha alentado a la población catalana "a salir de casa el 9N y hacer una demostración de fuerza", y ha criticado que las impugnaciones del Ejecutivo central obedecen a razonamientos políticos, y no jurídicos.

"Si lo que están haciendo es usar las impugnaciones para que nos debilitemos y acomplejemos, de aquí debe salir la reacción contraria, están a punto de impugnarnos el pensamiento", ha recalcado Rovira, que ha dicho no haber tenido ninguna información de la Generalitat sobre el asunto.

Desde ICV-EUiA, la portavoz de la formación en el Parlament, Dolors Camats, ha insitido a la misma emisora en que "la persecución que está haciendo el Gobierno español tiene la excusa jurídica y sobre todo tiene la intencionalidad política".

A su juicio, debe seguir siendo una gran movilización como estaba previsto, ha apuntado la necesidad de esperar a saber el alcance de la impugnación planteada para seguir adelante y ha acusado al PP de utilizar a Catalunya como "cortina de humo de sus vergüenzas" con el anuncio de una impugnación el mismo día en que trasciende la detención de 52 personas en la operación Púnica.

"Hace falta apoyar que el día 9 de noviembre sea una movilización tan o más espectacular como las últimas vividas en Cataluña, y ahora denunciando que no nos la han dejado hacer de forma legal y democrática", ha criticado Camats.

Desde la CUP, el diputado Quim Arrufat ha apostado por sacar las urnas y "desobedecer la prohibición del Estado", porque sus imposiciones son totalmente previsibles, ha dicho en declaraciones a Rac1 recogidas por Europa Press.

De convocarse una reunión del presidente de la Generalitat, Artur Mas, sobre el 9N, ha dicho que su formación acudirá para conocer sus planteamientos.

El Gobierno central no tiene ninguna acto administrativo para impugnar el proceso participativo, ha observado Arrufat, que ha alentado al líder del Govern a mantenerse "firme" para seguir adelante.