Bilbao - El lehendakari, Iñigo Urkullu, abogó ayer por un nuevo modelo de Poder Judicial que se integre en el sistema institucional de Euskadi, todo ello sin renunciar a un “Poder Judicial propio”. El jefe del Ejecutivo vasco se expresó así en el acto de la Apertura del Año Judicial celebrado en el Palacio de Justicia de Bilbao, en el que compartió atril con el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) Juan Luis Ibarra, y el fiscal superior de la CAV, Juan Calparsoro.

En su intervención, Urkullu aseguró que su Ejecutivo no está satisfecho “con el modelo, dubitativo e inacabado, de relación e integración del Poder Judicial en el sistema institucional de Euskadi”. “Con independencia de nuestra legítima aspiración a lograr un Poder Judicial propio, debemos insistir en que otro modelo es posible con el actual marco constitucional. No solo posible, sino deseable”, afirmó. En este sentido, el jefe del Ejecutivo vasco dejó claro que no se “resigna a la caracterización de los cuerpos del personal no judicial como cuerpos nacionales; a la dependencia del Ministerio de Justicia del cuerpo de secretarios y secretarias judiciales con la implicación en la normalización lingüística de dicho personal”. “No nos resignamos a la falta de participación efectiva en la determinación de la demarcación y planta judicial, a que se diluya el papel del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco como cúspide de la organización judicial en Euskadi”, apostilló. El lehedakari desveló, asimismo, que el Gobierno Vasco ha mantenido ya un primer contacto con el ministro español de Justicia, Rafel Catalá, con el que se ha compartido las expectativas de un nuevo tiempo de mayor colaboración dentro de la estrategia legislativa que impulsa el Gobierno español.

Críticas a Gallardón Por su parte, el presidente del TSJPV Juan Luis Ibarra, no ahorró en su discurso las críticas al anterior ministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón, al tiempo que expresó su confianza en su sucesor en el cargo, Rafale Catalá, permita un pacto de Estado para la modernización de la Justicia. “Debemos confiar en que el nombramiento del nuevo ministro exprese un cambio de fondo hacia la obtención de los consensos que nos permitan alcanzar un Pacto de Estado. Un acuerdo que retome el camino de la modernización dinamitado por las dinámicas ciegas que hemos padecido durante la precedente etapa ministerial”, afirmó Ibarra, que reclamó la ayuda en este sentido del Ejecutivo liderado por Urkullu.