Bilbao - El coordinador de Lokarri, Paul Rios, reclamó ayer que la ley penitenciaria se adecue al nuevo tiempo sin la violencia de ETA por lo que considera que los presos relaciones con la organización armada deben tener “como mínimo” las mismas oportunidades que cualquier otro recluso “para proceder a la reintegración en la sociedad”.
En una entrevista concedida a Onda Vasca, Rios, que el pasado jueves anunció la disolución de Lokarri en marzo de 2015, aseguró que con su petición no reclama la amnistía para los reclusos, pero sí que la actual legislación, “que se aplicó con carácter de excepcional”, tenga en cuenta la situación actual del proceso de paz. “No estoy diciendo que haya que proceder a una amnistía de las personas presas, pero, como mínimo, tienen que tener las mismas oportunidades que cualquier otro recluso para proceder a la reintegración de la sociedad, y eso no está ocurriendo”, manifestó Rios, para quien esta legislación excepcional constituye un gran obstáculo en un momento de reconstrucción de la convivencia.
A su juicio, durante muchos años y bajo la premisa de la necesidad de combatir a ETA se ha aceptado no solo que no se investigue la tortura, “sino que también se persiga personas por su actividad política”. Y aunque recordó que se han dado casos de absolución como en el proceso de Udalbiltza o de los cuarenta jóvenes acusados de pertenencia a Segi, “todavía este verano dirigentes de la izquierda abertzale han sido condenados a cuatro años por supuestas actividades de 2003”, Rios se refería de este modo a la sentencia del caso de las herriko tabernak, en el que, entre otros, se condenó a Rufi Etxeberria y Joseba Permach. A su entender, estamos en una etapa de cambio en la que también debe participar la justicia, “investigando los casos de tortura y, sobre todo, poniendo fin a todos este tipo de juicios por actividades que son legítimas y no deben ser perseguidas en un Estado de Derecho”.
Rios recordó que hace cinco años, en 2009, había 740 presos de ETA, mientras que en la actualidad esta cifra es de 470, aunque aseguró que todos ellos están cumpliendo sus penas “de manera prácticamente íntegra”. El coordinador de Lokarri coincidía en las previsiones realizadas por el Gobierno Vasco y estimó que en 2020 la cifra de presos rondará los dos centenares, “y todos ellos con penas larguísimas”.
El coordinador de Lokarri se refirió asimismo a los ataques de kale borroka sufridos en los últimos meses -Loiu y Zorrotza- y aseguró que se les debe dar la “importancia justa”. A su entender, en todos los procesos de paz “aparecen grupos de carácter disidente”. Señaló, que “lo que se debe hacer es reforzar la cultura de paz para que nadie vuelva a caer en la tentación de usar la violencia”.