vitoria - El lehendakari ve con buenos ojos que la izquierda abertzale plantee avanzar en el autogobierno siguiendo distintos ritmos en la CAV, Nafarroa e Iparralde. El presidente de Sortu, Hasier Arraiz, revela en una entrevista con Efe que, en su encuentro del lunes, Iñigo Urkullu compartió con él la necesidad de acometer un proceso constituyente para Euskal Herria que, a su vez, debería desgajarse en tres procesos, uno para cada ámbito territorial. “Me dijo que a partir de esa filosofía podemos empezar a construir juntos”, explicó. La postura del lehendakari no supone ninguna novedad, ya que el PNV ha apostado históricamente por dar pasos pero respetando las realidades y la voluntad de cada ámbito territorial. Por ello, contribuyó a la redacción del Estatuto de Gernika de la CAV en 1979, mientras HB propugnaba la abstención o el rechazo amparándose en que el texto ponía tierra de por medio con Nafarroa. “Sin Navarra no daremos un paso”, avisaron. Esa posición, además del rechazo a la violencia, acabó distanciando a Aralar de la izquierda abertzale. No obstante, en los últimos años ha ido matizando en sus procesos de reflexión interna y, en el pleno de política general, Arraiz apostó por que “el proceso constituyente de Euskal Herria esté compuesto, a su vez, de otros tres”. En definitiva, que en la CAV, Nafarroa e Iparralde pueda haber diferentes “puntos de partida, ritmos y preguntas”.
Ese planteamiento podría brindar mayor recorrido aún a los trabajos sobre el nuevo estatus desde la ponencia del Parlamento Vasco, ya que Arraiz admitió en el pleno que la Cámara no es el “ombligo del mundo, pero no estamos mal situados”. Pero uno de los puntos que sigue distanciándolos es la vía unilateral. El PNV aboga por un acuerdo entre vascos, pero es consciente de que en algún momento el Estado habrá de avalarlo, y también valora el modelo escocés, donde la consulta fue pactada entre los gobiernos de Escocia y Reino Unido. Para Sortu no cabe el modelo escocés porque al otro lado del teléfono no hay un Gobierno español dispuesto a acuerdos. Según explicó Arraiz a Efe, Urkullu le dijo que “comprende” la apuesta unilateral, aunque sigue abogando por “persistir en la mano tendida de acuerdos con Madrid”. Matizó que para el lehendakari es “una cuestión de tiempos”, que él “también piensa que esto no puede ser indefinido” y que “puede llegar un momento en que, si por parte del Estado no hay ninguna voluntad de acuerdo, esa vía puede quebrar”. Arraiz dijo que la prioridad no es disputar la hegemonía al PNV, sino “tener capacidad para poder acordar una estrategia” para el pueblo vasco.