estados Unidos ha sido un imán para los inmigrantes desde su fundación. Desde 1776 ha recibido con diferente ánimo y trato a millones de emigrantes de todos los rincones del planeta. Hoy en día siguen llegando oleadas de almas deseosas de encontrar en el país de las barras y estrellas su porción de gloria. Según las estadísticas oficiales, que datan de 2012, el país cuenta con 40,4 millones de inmigrantes, incluyendo once millones de indocumentados. En ese mismo ejercicio fiscal un total de 1.031.631 personas obtuvieron el permiso permanente de residencia y trabajo. La mayoría lo lograron contrayendo matrimonio con algún ciudadano norteamericano o habiendo demostrado ser familiar directo de alguno de ellos. Pero 40.320 personas obtuvieron la deseada tarjeta verde al ser agraciadas por el Programa de Visados de Diversificación de Inmigrantes. Esta iniciativa consiste en un sorteo anual organizado por el Gobierno norteamericano por el cual se conceden 50.000 visados permanentes a ciudadanos de todo el planeta. El 1 de octubre se abrió el plazo de inscripción para el sorteo que se celebrará en mayo de 2015 y que abrirá las puertas del país a los afortunados durante el año fiscal de 2016.
El Programa de Visados de Diversificación de Inmigrantes se empezó a aplicar en 1995 con el fin de diversificar la población inmigrante del país mediante la selección al azar de candidatos de todos los países que cuentan con tasas bajas de inmigración en los Estados Unidos en los cinco años anteriores (menos de 50.000 inmigrantes). Al principio se estableció que serían 55.000 los visados reservados para esta iniciativa, pero desde 1999 cinco mil de ellos se reservan para el programa NACARA, que reparte visas a países centroamericanos.
Debido a las estadísticas de inmigración en Estados Unidos entre 1990 y 1994, en el primer sorteo no podían inscribirse ciudadanos de trece países: Canadá, China, República Dominicana, El Salvador, Haití, India. Jamaica, México, Filipinas, Corea del Sur, Taiwán, Reino Unido (excepto Irlanda del Norte) y Vietnam. Año a año, según las estadísticas de inmigración, la relación ha ido variando hasta configurar la actual lista negra de 19 países. En la entrada y salida de estos lugares de procedencia vetados han influido factores como las modas de adopción de niños del extranjero. Es el caso de Rusia, por ejemplo, que en 2010 no pudo ser elegible por la cantidad de niños rusos que se adoptaron en Estados Unidos en los años anteriores. Lo mismo ocurrió con Guatemala entre los años 2009 y 2012.
trece millones de inscritos El sorteo despierta todos los años una gran expectativa. En 2008 se metieron 13,6 millones de solicitudes en el bombo virtual. El Gobierno norteamericano, para repartir los 50.000 visados, divide el planeta en seis regiones: África, Asia, Europa, América del Norte, Oceanía y América. África y Europa se reparten el 80% de las visas, pero ningún país puede llevarse más del 7% de los visados, 3.500.
La computadora encargada de hacer el sorteo selecciona una lista de premiados mayor que los 50.000 anunciados, ya que muchos de los agraciados no reclaman su visado o no se les concede por no reunir los requisitos. Y es que el sorteo no es sinónimo de éxito. Se trata solo del inicio del proceso de obtención del visado. Las estadísticas del año 2009, por ejemplo, demostraban que el país cuyos ganadores del sorteo tenían más probabilidades de obtener la tarjeta verde era Nepal, ya que el 85,4% de los agraciados obtuvieron el visado. En el polo opuesto estuvo Senegal, donde solo lo consiguieron el 14% de los agraciados. Ese mismo año el 50,83% de los europeos que fueron elegidos por el ordenador en el sorteo terminaron con el visado permanente en su bolsillo.
Hasta el 3 de noviembre quien quiera puede apuntarse en el sorteo correspondiente al ejercicio fiscal de 2016. Para ello solo tiene que entrar en la página web www.dvlottery.state.gov y rellenar correctamente el formulario con todos sus datos. El Departamento de Estado aconseja que no se espere a los últimos días para inscribirse, puesto que la excesiva demanda a finales del plazo puede afectar a la velocidad del sistema. Eso sí, advierten de que no se admitirá que la misma persona se inscriba más de una vez, puesto que el Gobierno “utiliza tecnología sofisticada para detectar registros múltiples y si se presenta más de un registro será descalificado”.
Para que la inscripción en el sorteo sea válida, el solicitante debe cumplir con uno de los siguientes requisitos: tener aprobada la secundaria o su equivalente o bien acreditar dos años de experiencia laboral en los últimos cinco años en alguna profesión que requiera como mínimo dos años de preparación.
Una vez completado todo el formulario con sus datos y los de su cónyuge y sus hijos, que también obtendrían el visado en caso de ganar, el programa le adjudica un número de confirmación con el que se podrá acceder a la misma página web el próximo 5 de mayo para comprobar si ha sido uno de los 50.000 ganadores del sorteo. En caso de ser así, en la web se le dan al afortunado las instrucciones a seguir para iniciar su proceso de obtención del visado, que deberá finalizar antes del 30 de septiembre de 2016. Uno de los trámites más importantes es la entrevista personal, que se debe pasar en la respectiva embajada de Estados Unidos, y en la que se deben abonar las tasas correspondientes que, por cierto, no se devolverán en el caso de que el proceso desemboque en la negativa al visado.
el lado negativo Desde su existencia este programa ha tenido sus inconvenientes. Por un lado, la inscripción en el sorteo es tomada como una solicitud de visado y esto puede ser tomado en cuenta por el departamento de inmigración a la hora de conceder en el futuro visados de otro tipo, como el de turista. Tampoco le han faltado sus detractores en el ámbito de la política. Los republicanos han intentado anular el programa en varias ocasiones alegando que era una oportunidad más para que los terroristas entraran en el país. De hecho, el terrorista egipcio Hesham Mohamd Hadayet, que mató a dos personas en el aeropuerto de Los Ángeles en un tiroteo en 2002, obtuvo su tarjeta verde a través de este programa.
En 2012 se informó a 22.316 personas de que habían ganado el sorteo, pero se demostró que por un error de programación este se había realizado de forma incorrecta. El resultado se anuló y los afectados presentaron una demanda colectiva. Su petición no prosperó y vieron cómo su boleto para el sueño americano perdía todo su valor.