bilbao - Después de Idoia Mendia y Asier Harraiz, el lehendakari Iñigo Urkullu se reunirá mañana con Arantza Quiroga (PP) y días más tarde con el único representante de UPyD Gorka Maneiro. A priori la cita con la presidenta de los populares de la CAV se presenta con tintes más ásperos que las dos anteriores en las que tanto el jefe del Ejecutivo de Gasteiz como los líderes del PSE y EH Bildu han puesto más el acento en tender puentes y asomarse a la centralidad política e institucional que en exhibir músculo partidario y mostrar un perfil claro de partido opositor.

Los precedentes más cercanos no ayudan a pensar en una reunión de grandes acuerdos ni aproximaciones. El verano ha dejado un reguero de episodios de alta tensión en las relaciones entre el PP, por un lado, y el PNV y el Gobierno Vasco, por otro. Las fricciones por las acusaciones sobre la financiación de los batzokis o el debate sobre el acceso de los extranjeros a las ayudas de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) han dinamitado las relaciones entre ambas formaciones. En cualquier caso, los populares afrontan la reunión con “absoluta disposición a arrimar el hombro” sobre todo para mejorar la situación económica vasca.

Fuentes de este partido aseguraron ayer que la entrevista se realizará “en un clima de normalidad y de entendimiento”. Desde Lehendakaritza aguardan a ver cuál será la agenda que pondrá Arantza Quiroga sobre la mesa mañana a partir de las cinco y media de la tarde.

La última vez que pudieron intercambiar ideas fue el pasado 25 de septiembre en el Parlamento Vasco durante el Pleno de Política General. La dirigente del PP de la CAV centró su turno de réplica a la intervención del lehendakari en el debate identitario, especialmente en la cuestión del autogobierno y del nuevo estatus para Euskadi. “Si su proyecto es la independencia, siga el camino escocés; plantéelo como único programa en las elecciones [autonómicas] de 2016 o adelántelas”, retó Arantza Quiroga a Iñigo Urkullu.

Es más que probable que esta cuestión, al igual que el de la pacificación y la convivencia, estén sobre la mesa, como también lo estará la situación económica de Euskadi. En este sentido, desde el Partido Popular aseguraron ayer a la agencia Europa Press que Quiroga tiene “en la recámara” asuntos importantes que “compartir y contrastar” con el lehendakari. Durante su intervención en el Pleno de Política General, la dirigente popular conminó al lehendakari a “rehacer el pacto fiscal” para buscar flexibilizar los impuestos y adaptarlos “a la nueva realidad”.