madrid - Tal y como estaba previsto, el Gobierno español ha reclamado al Tribunal Constitucional (TC), a través de la Abogacía del Estado, que anule la junta electoral puesta en marcha por Artur Mas enviando al alto tribunal un “incidente de ejecución” por el incumplimiento de la providencia dictada el pasado día 29 de septiembre, en la que el TC paralizaba tanto la ley como el decreto del referendo y sus anexos, “así como las restantes actuaciones de preparación para la convocatoria de dicha consulta o vinculadas a ella”.
La vicepresidenta española Soraya Sáenz de Santamaría ya anunció el viernes que los servicios jurídicos estaban estudiando dar este paso ante un nuevo “incumplimiento” del president; y a partir de ahora el tribunal tendrá que dar traslado a las partes personadas en el procedimiento, entre las que están la Generalitat y el Parlament, para que presenten alegaciones sobre esta nueva acción del Ejecutivo de Madrid que se incorporará a los recursos ya presentados. Cuando el incidente de ejecución sea estudiado y las alegaciones presentadas, el Constitucional debatirá el tema en pleno. El TC se reúne hoy en una sesión ordinaria en cuyo orden del día no se incluye ningún tema relativo a la impugnación de la Ley de Consultas ni del decreto de convocatoria del 9-N.
La decisión sobre la junta electoral, que se citó por primera vez este fin de semana con la baja de Brugué, enervó al número dos de CDC, Josep Rull, quien criticó a Rajoy por “judicializar” el 9-N cuando, a su juicio, es un debate político. “El tema catalán no se resuelve desde los tribunales, sino desde la política y desde la democracia. El 9-N no es un problema, es una oportunidad, declaró, convencido igualmente de que habrá referendo: “Que nadie se inquiete por la consulta. Habrá consulta y la habrá en condiciones correctas y democráticas”, zanjó.
Por otra parte, el Parlament envió ayer al TC el escrito de recusación de su presidente, Francisco Pérez de los Cobos, y del magistrado Pedro José González-Trevijano, con intención de que ambos no participen en las deliberaciones relativas a la Ley de consultas. La Cámara catalana informó en un comunicado de que esta petición de recusación fue enviada por fax y por mensajero, cumpliendo con la solicitud conjunta de los portavoces de CiU, ERC, ICV-EUiA y CUP. El Parlament recusa al presidente del TC al considerar que su anterior militancia en el PP y sus colaboraciones con FAES comprometen su objetividad e imparcialidad a la hora de deliberar en los recursos de inconstitucional que ha presentado el Gobierno de Rajoy. En cuanto a González-Trevijano, cuestiona su falta de “objetividad e imparcialidad” por una serie de artículos y colaboraciones en medios de comunicación en los que “de forma reiterada” ha hecho manifestaciones contra el nacionalismo catalán. - I.S.M.