Bilbao - El todavía secretario general del PSE, Patxi López, sigue sumido en la ambigüedad al no aclarar su futuro por segundo día tras haber anunciado que un congreso extraordinario le relevará de su cargo en septiembre. Eso sí, volvió a dejar implícito que sigue en el juego del PSOE, más abierto que nunca por las citas abiertas para sustituir a su líder, Alfredo Pérez Rubalcaba, y con posterioridad para elegir en primarias abiertas a la ciudadanía al candidato socialista a La Moncloa.
Ayer repitió reiteró lo que ya se ha convertido en un mantra, que "no tiene un guion escrito", una fórmula para aclarar que pese a la nefasto aval de su mochila -esos 100.000 votos perdidos de una tacada- sigue a disposición del PSOE. "Mi intención es ayudar a acertar en este partido", explicó. Esta respuesta va en la línea de los que si López ha perdido su oportunidad de liderar el partido quizá albergue la esperanza de formar parte de la nueva ejecutiva aunque esté dirigida por otro. De ahí que no sorprenda la catarata de halagos que lanza a Susana Díaz y Eduardo Madina. - R. Ugarriza