Pamplona - Después de la renuncia de Alfredo Pérez Rubalcaba a liderar el PSOE, por la tarde el esquema se repetía en la sede de los socialistas de Navarra. Roberto Jiménez, que lleva desde 2008 al frente del PSN, anunciaba ayer que renuncia a nuevas reelecciones, tanto para presidir listas electorales como para ocupar la secretaría general en Navarra y que convocará un proceso de primarias abiertas y un congreso extraordinario en Navarra.
Lo hace, según afirmó, convencido de que es necesaria una regeneración en el partido, tanto a nivel regional como nacional, pero matizó que la decisión no responde a los resultados del domingo sino que es una opción que ya tenía tomada desde el pasado 2 de marzo, cuando Ferraz vetó la moción de censura en Navarra. "Dimití delante de la dirección federal pero me pidieron que no lo hiciera porque podría perjudicar al partido en un contexto de elecciones y así lo hice. Ahora no dimito, pero presento los mecanismos para que haya un relevo, que viene a tener los mismos resultados", apuntó Jiménez que no ocultó su descontento con algunas de las decisiones que Ferraz ha impuesto a la formación en Navarra y que habrían tenido una negativa repercusión en los resultados electorales.
"En Navarra no hemos sabido responder a las aspiraciones de cambio de la mayoría social de izquierdas que ha optado por otras opciones políticas, fue el PSN quien primero dio la espalda a los electores y lo hizo porque antes que secretario general he sido siempre un disciplinado y leal militante del PSOE", expuso Jiménez, para señalar que ha acatado "siempre, a veces muy a mi pesar, las órdenes de la dirección federal".
Gobierno de UPN con muchas dudas Por si fuera poco la crítica al veto de la moción, Jiménez claro que "frente a lo que se ha dicho", la decisión de formar un gobierno de coalición con UPN "fue una decisión llena de dudas por mi parte", y aseguró que la conformación de este ejecutivo "fue de alguna manera por un ejercicio de lealtad hacia el PSOE y de responsabilidad por Navarra, no por una convicción absoluta de la bondad de dicho acuerdo". Según dijo, fue una decisión que tomó la Comisión Ejecutiva Federal.
"La dirección del PSN, a quien represento, no hemos sabido conseguir que los electores distingan nuestro proyecto del de UPN y PPN, muchos electores nos meten en el mismo saco, por eso también creo que el PSN necesita un revulsivo que transforme nuestro proyecto hasta que dé respuesta a la demanda de cambio", apuntó, antes de dejar entrever que gran parte de la responsabilidad de esas decisiones erróneas fueron obra de Ferraz. "El PSOE necesita una regeneración integral, más allá de dar pasos a nuevas caras en el partido, creemos que el revulsivo debe alcanzar por completo al proyecto político", opinó. Una vez conocida la decisión, Jiménez, que seguirá como parlamentario hasta agotar la legislatura, apuntó que tras el congreso general en Madrid, en Navarra se celebrará un proceso de primarias abiertas para elegir a los candidatos de las próximas elecciones y seguidamente un congreso extraordinario en Navarra para elegir a un nuevo secretario general. Tal y como apuntó Jiménez, "las primarias se celebrarían primero y posteriormente el congreso".