Bilbao. Tras el parón navideño, el proceso judicial por la muerte de Iñigo Cabacas se ha reactivado en varios frentes. Por un lado, la jueza instructora retomó ayer la toma de declaraciones de la fase de instrucción con la presencia de un nuevo testigo que aportó un testimonio especialmente trascendente, según la acusación particular. Además, los días 30 y 31 de este mes acudirán a los juzgados de Bilbao los cuatro er-tzainas que han sido imputados hasta la fecha por el fallecimiento de Pitu por el impacto de una pelota de goma en la cabeza.

Según informó ayer naiz.info, el testigo que acudió ayer al Juzgado de Instrucción número 10 de Bilbao "estuvo al lado del joven basauritarra cuando cayó mortalmente herido por un pelotazo de la Ertzain-tza" el 5 de abril de 2012, tras el partido disputado entre el Athletic y el Schalke 04. En declaraciones a ETB, la abogada de la familia Cabacas, Jone Goirizelaia, afirmó que "el testigo nos ha dado datos y nos ha puesto encima de la mesa elementos que nos van a permitir aclarar un poco más, ir más al fondo de la investigación".

A las puertas de los juzgados, la letrada agregó que "evidentemente todavía faltan muchas cosas por hacer, pero nos ha señalado datos que no teníamos hasta este momento". Respecto a la duración del proceso, el fiscal superior vasco, Juan Calparsoro, admitió que "en su día" se pensó que iba a ser "más rápido". "Se está prolongando en el tiempo y es complicado. Es un proceso en el que hay que acreditar muchas cosas y veremos", zanjó.

Sobre la inminente declaración de los únicos agentes de la Ertzaintza imputados, desde el Departamento de Seguridad se limitaron a señalar a DNA que "lo que se deduzca será lo que decida la jueza", por lo que se está "a la espera de las conclusiones" de la magistrada.