MADRID. Fuentes conocedoras de la decisión han informado a Efe de que a la vista de la información que el ministerio remitió a la fiscalía, ésta considera que los hechos carecen de relevancia penal, ya que la filtración se produjo "de forma no intencionada debido a un error de la oficina de prensa".
Esta misma mañana, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha aceptado la dimisión que su director de Comunicación, Alberto Gimeno, presentó ayer tras el error en su departamento que comunicó a las 15.06 horas del pasado miércoles que la Guardia Civil había practicado varias detenciones en la CAV y Navarra.
Una vez constatado que los agentes ni siquiera habían iniciado la operación, prevista para más tarde, Interior remitió veinticinco minutos después una nota anulando a todos los efectos la anterior.
Esa anticipación provocó el malestar de los agentes que formaban el operativo que incluso pudo afectar al resultado de la misma porque los detenidos tuvieron tiempo de ocultar pruebas.
Por todo ello, la Fiscalía abrió el jueves diligencias para aclarar lo ocurrido a Interior, que atribuyó lo sucedido a "un error humano".