La CAV sella la estabilidad presupuestaria en todas las instituciones

BIZKAIA Y ARABA APRUEBAN SUS cUENTAS, Y gIPUZKOA LO HARÁ EL LUNES TRAS EL PACTO ENTRE EL pnv Y gARITANO

Míriam Vázquez

Bilbao. Cuando se vio obligado a decretar una prórroga presupuestaria en abril ante la falta de apoyos, el Gobierno Vasco optó por redoblar sus esfuerzos para engrasar sus relaciones con la oposición, consciente de que un segundo veto en diciembre lo abocaría a un adelanto electoral. Unos meses después de la prórroga, pudo sellar un pacto global con el PSE, e incorporó al PP a la vertiente fiscal del acuerdo, unas alianzas que no solo encarrilarían la aprobación de los Presupuestos para 2014, tal y como ha sucedido, sino que servirían para tejer complicidades y allanar la negociación de las Cuentas en las instituciones gobernadas por los firmantes. Así, los socialistas, y más tarde los populares, se prestaron a pactar los Presupuestos de la Diputación jeltzale de Bizkaia, que también fueron aprobados ayer. En la Diputación de Araba, gestionada por los populares, han sido los jeltzales quienes han facilitado que prospere el proyecto de Javier de Andrés tras negociar un buen puñado de enmiendas y tras hablar con el PP las Cuentas de Urkullu. La institución foral también aprobó ayer su proyecto, redondeando así la fotografía de estabilidad institucional y presupuestaria que arrojó la jornada. EH Bildu, que no ha participado en los acuerdos, tampoco ha quedado acorralada en la Diputación de Gipuzkoa: en consonancia con la apuesta de Iñigo Urkullu por posibilitar que todas las instituciones dispongan de Cuentas con las que gestionar la crisis, el PNV se ha prestado a negociar y, salvo sorpresa mayúscula, pasado mañana Martin Garitano cerrará el Pleno de Juntas con la tranquilidad de haber visto aprobado su proyecto.

También ayer trascendía que los jeltzales no presentarán una enmienda a la totalidad de las Cuentas del Ayuntamiento de Barakaldo, gobernado por el PSE, y se mostraron dispuestos a llegar a un acuerdo. Casi al mismo tiempo, y mientras socialistas y populares apostaban por vetar los Presupuestos de Juan Karlos Izagirre en Donostia, el PNV se decantaba por analizarlos "a fondo" y no enmendarlos de buenas a primeras. Las alianzas que ya han prosperado y las que se intuyen en el horizonte posibilitarán que las principales instituciones cuenten con Presupuestos en un año determinante para transitar hacia la recuperación económica. Los jeltzales, por su parte, saldrían reforzados en las instituciones en las que gobiernan por haber podido forjar consensos y, allí donde se encuentran en la oposición, también figurarían en la centralidad por prestarse a sellar acuerdos y no cerrarse en banda con enmiendas a la totalidad.

Cuentas aprobadas En cuanto al pleno de Bizkaia, la Diputación de José Luis Bilbao aprobó ayer definitivamente sus Presupuestos con las abstenciones de PSE y PP, y el voto en contra de EH Bildu. La apuesta de socialistas y populares por no votar a favor podría ayudarlos a preservar su perfil propio y a no hacer excesivamente suya la gestión del gobierno foral. También optaron por la abstención en el Parlamento Vasco. En las Juntas de Araba, el PNV sí votó a favor de los Presupuestos de los populares, aunque en ese caso no le quedaba otra alternativa si quería facilitar la aprobación de las Cuentas: ante el veto de PSE y EH Bildu, al PP no le bastaba con la abstención del PNV, sino que necesitaba su apoyo expreso.

El proyecto alavés asciende a 415,4 millones, un 4,4% más que el proyecto elaborado para 2013 que finalmente no pudo ser aprobado. Las Cuentas contemplan 146,2 millones para gasto social, incrementan un 23,83% la inversión, y limitan los gastos de funcionamiento y el endeudamiento.