granada. El expresidente del Gobierno y actual presidente de FAES, José María Aznar, comparó ayer el "desafío al Estado de Derecho" que en su opinión propugna la consulta independentista catalana con la estrategia de ETA, ya que ambas son, a su juicio, "estrategias de destrucción" al pacto de la Constitución. Si bien el expresidente del PP apuntó que la organización terrorista seguía una estrategia "distinta", era "frontal e ilegal" como lo es convocar la consulta en Catalunya, según manifestó.

Comparó el referéndum previsto en Catalunya en noviembre del año que viene con la estrategia de ETA porque dicha consulta "no impugna solo las reglas básicas de la organización territorial del Estado", sino porque aspira a "destruir una historia vivida en común", y porque "celebra el desgarro y se recrea en el desastre como propuesta de futuro".

Aznar realizó estas manifestaciones en el marco del Seminario Luis Portero de Derechos Humanos, en el que participó en Granada junto al exmagistrado del Tribunal Europeo de Derechos Humanos Javier Borrego en la conferencia Por un final de ETA sin impunidad: la sentencia de Estrasburgo y sus efectos. Aznar volvió a demostrar ser el referente de los sectores más extremistas del PP de Mariano Rajoy al asegurar que el Estado de derecho debe reaccionar "con eficacia y de manera proporcionada a la gravedad del desafío" que supone la consulta soberanista catalana. "España no se va a romper", advirtió Aznar, para quien el Ejecutivo debe contar con "el apoyo de todos" frente a la pretensión "disgregadora, antidemocrática e inconstitucional", un apoyo que, por su parte, quiso "afirmar con claridad".

Muy lejos de estos planteamientos, los de dos de los padres de la Constitución, Miguel Roca y Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, que llamaron ayer a un acuerdo político para resolver el problema de Catalunya y evitar la "no deseable" consulta soberanista, sobre la base del reconocimiento de que es una nación. Aunque creen que no hay "voluntad política" para ese tipo de acuerdo, ambos advirtieron de que eso puede cambiar y hicieron hincapié en que se trata de "tomar decisiones" con "coraje", y en que la vía para una solución es política y "no de utillaje jurídico". "Cataluña no es mejor o peor que Madrid, pero Madrid no tiene una identidad nacional y Cataluña, sí; hay que reconocer eso como punto de partida para llegar a una solución", propuso Miguel Herrero en el tercer ciclo de diálogos España plural, Catalunya plural, organizado por la Fundación Diario Madrid y la Asociación de Periodistas Europeos. Para Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, "Cataluña es una nación y tiene una identidad nacional clarísima", pero una nación "no tiene por qué ser un Estado independiente".

Los partidos catalanes volvieron a marcar su posición ayer sobre la consulta anunciada el pasado jueves. El portavoz adjunto de ERC, Oriol Amorós, manifestó que su formación, de hecho, está abierta a la posibilidad de que el Gobierno español quiera negociar la pregunta de la consulta y "el cómo se vota", tal y como hizo el Gobierno británico al pedir una pregunta más clara en el referendo escocés.

Según indicó Amorós en la rueda de prensa posterior de la comisión permanente de ERC, el Estado "debe abandonar su postura absurda de no querer dejar votar a los catalanes, porque esto en una democracia no se aguanta y en Europa nadie lo entiende". "Si el Gobierno y los partidos españoles quieren resolver una crisis política de esta magnitud tienen que saber que esto en democracia se soluciona votando, y no utilizando la amenaza y la coacción", añadió el portavoz adjunto de ERC en el Parlamento catalán. "Podemos debatir sobre cómo se puede votar, y cuestionar la pregunta, podemos hablarlo todo, pero no nuestro derecho a votar".

críticos del psc Menos claro lo tiene el PSC, cuya división interna sobre el proceso soberanista volvió a hacerse patente ayer tras la publicación de un manifiesto de la corriente crítica Agrupament Socialista, en la que reclama al líder del partido, Pere Navarro, "abrir urgentemente conversaciones con los exponentes diversos del socialismo catalán" para recuperar la unidad de acción en Cataluña y rectificar la estrategia actual de la formación, que según esta corriente pasa por que Navarro rectifique su rechazo al pacto sobre la pregunta y la fecha de la consulta.