La Comisión Europea rechazó ayer valorar el anuncio de Artur Mas, de la fecha y las preguntas de la consulta soberanista por tratarse de un "asunto interno de España", pero reiteró que Catalunya quedará automáticamente fuera de la UE si se independiza."No tenemos comentarios sobre estos anuncios que se refieren a un asunto interno de España", se limitó a señalar la portavoz del Ejecutivo comunitario, Pia Ahrenkilde. "Si una parte del territorio de un Estado miembro dejase de ser parte de ese Estado para convertirse en un nuevo Estado independiente, los Tratados ya no serían aplicables en dicho territorio", explicó la portavoz, repitiendo palabra por palabra la posición oficial de las instituciones europeas que ya fue expresada por el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy. "Un nuevo Estado independiente, por el hecho de alcanzar la independencia, pasaría a convertirse en un tercer país con respecto a la UE y los Tratados dejarían de ser aplicables en su territorio desde el día de su independencia", precisó. Si una Catalunya independiente quiere volver a entrar en la UE, debería pedir la adhesión, que tiene que ser aceptada y ratificada por unanimidad de los Estados miembros.