madrid. Las últimas revelaciones en torno al caso Noos han soliviantado a parte de los partidos políticos españoles. Según publicaba ayer El Mundo la empresa Aizoon, la firma de los duques de Palma que se nutría en su mayor parte de fondos públicos del Instituto Noos comandado por Iñaki Urdangarin y su exsocio, Diego Torres, sufragó la comunión de dos de los nietos del rey. PSOE e IU, aunque la segunda formación con mayor dureza, solicitaron ayer explicaciones.

El secretario general del PSOE en el Congreso de los Diputados, Eduardo Madina, advirtió ayer que "alguien tendrá que explicar muchas cosas" si se prueban las informaciones que apuntan a que Aizoon se hizo cargo de esos gastos. Cuestionado al efecto por este asunto en los pasillos del Hemiciclo, el responsable socialista aseguró que resulta indispensable obtener una explicación convincente, ya que la información apunta que el convite de la comunión pudo haber sido ordenado por la infanta Cristina a su secretario, Carlos García Revenga. Al igual que Madina, otro peso pesado de las filas socialistas también se refirió a las informaciones recabadas por la Unidad de Delincuencia Económica (UDEF) a instancias del juez Castro dadas a conocer por el rotativo madrileño. Fue el exvicepresidente del PSOE; Alfonso Guerra, quien tildó de "raro" el asunto, pese a desconocer los detalles.

IU fue el partido que con mayor dureza criticó unas novedades del caso Noos que vuelven a apuntar directamente hacia la hija del monarca español, que supuestamente costeó con dinero proveniente de la entidad sin ánimo de lucro montada por su marido para costear un convite familiar, según estima la Policía. Su portavoz de Justicia, Gaspar Llamazares, estimó que los gastos privados pagados por Aizoon a los Duques de Palma vienen a confirmar que la infanta Cristina no era "un florero" y que conocía la trama del llamado caso Urdangarin.

En declaraciones en el Congreso, Llamazares incidió en que este tipo de noticias revelan "cada vez más irregularidades" y hacen "cada vez más evidente" la infanta Cristina, que fue inicialmente imputada pero que posteriormente le fue suspendida esa condición, "se enteraba de lo que ocurría y de lo que hacía su marido". "Esto abunda en la idea de que la infanta forma parte del caso y le va a ser difícil al fiscal argumentar que no hay razones para imputarla", añadió.

Por otro lado, ayer también se conoció que el juez instructor del caso, José Castro, rechazó incorporar a la causa una revista que publicó correos electrónicos íntimos de Iñaki Urdangarin porque entiende que no tienen "ningún interés" para la causa.