viroria. Han pasado 23 años desde que Augusto Pinochet abandonara el poder tras perder un referéndum popular, que puso fin así a una dictadura marcada por la muerte y desaparición forzosa de más de 30.000 personas, por la tortura y el exilio. Pero esta no es la única herencia de Pinochet. El dictador dejó un modelo económico, basado en la privatización y un sistema impositivo regresivo, que ha provocado grandes desigualdades. Pero este modelo está ahora en cuestión. Y es que la candidata de Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, se ha propuesto llevar adelante un ambicioso plan de reformas políticas.

Bachelet plantea reformar la Constitución de 1980, promulgada durante la dictadura, implantar un sistema de educación superior gratuito en un periodo de seis años para que los estudiantes no tengan que endeudarse con los bancos para costearse sus carreras y una reforma tributaria para costearlo. "A mí me encanta que haya mujeres en la política, pero no nos equivoquemos: aquí hay una carrera de proyectos de país distintos", aseguró recientemente Bachelet en referencia a que es la primera vez que dos mujeres son las principales candidatas a la presidencia de Chile. "Hay un proyecto de país que quiere continuar con lo que este gobierno ha llevado adelante y un proyecto de país, que yo represento, que quiere cambios fundamentales para enfrentar decididamente la desigualdad", agregó quien fue la primera mujer presidenta del país.

"Chile ha cambiado. Más allá de todos los avances en democracia, estamos enfrentando un nuevo ciclo político, económico y social, que requerirá de reformas y cambios transformadores, que nos permitieran enfrentar un viejo problema: la desigualdad", defendió.

En Nueva Mayoría, favorita para ganar las elecciones presidenciales y parlamentarias de noviembre, están integrados los partidos de la Concertación, el Partido Comunista de Chile (PCCh), la Izquierda Ciudadana, el Movimiento Amplio Social e independientes de centroizquierda. "El Partido Comunista decidió apoyar a Bachelet sobre la base de un compromiso programático, es decir, que dijimos que si programa era ese, reforma tributaria, reforma educacional, reforma de salud, una serie de puntos que tienen que ver con avances sociales, y la candidata dijo que sí, entonces consideramos que nuestro compromiso político era avanzar con los cambios", explica Eduardo Contreras, abogado y miembro del PCCh.

Bachelet ha logrado reunir en torno a su candidatura a una amplia base social y de izquierdas, que busca una transformación real de Chile y dejar atrás la dictadura de Pinochet. En esta alianza también están mucho de los líderes estudiantiles que encabezaron la protesta en demanda de una educación superior gratuita durante el Gobierno de Sebastián Piñera. "La mayoría de esos líderes estudiantiles son candidatos a parlamentarios en las mismas listas que Bachelet. Es decir, se está creando una mayoría política social distinta, eso es lo que está ocurriendo", asegura Contreras.

Entre los candidatos al Parlamento se encuentra Camila Vallejo, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh) entre 2010 y 2011, durante las protestas, y militante de las Juventudes del Partido Comunista. Contreras asegura que este es un momento crucial en la historia reciente de Chile y que el objetivo de su coalición es "desmantelar el Estado de Pinochet". "Hay que regresar a lo que había antes de Pinochet, cuando la salud era gratis, la educación era gratis, a eso queremos volver", apunta.