palma. El Gobierno de España aseguró ayer que adoptará en Gibraltar "medidas legales y proporcionales" para defender sus intereses, en un conflicto en el que reclamó al Reino Unido y al Peñón que actúen con "sentido común" y se vuelquen en un diálogo a cuatro partes, en el que también estaría la Junta de Andalucía. El presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, quiso dejar clara su posición sobre el conflicto en unas declaraciones a los periodistas tras la habitual reunión de verano con el Rey, en Palma de Mallorca. En esa alocución, el presidente también desvinculó las maniobras que realizará este mes la Armada británica en Gibraltar con este litigio y explicado que estos ejercicios "se vienen haciendo desde hace años" y que estaban anunciados a España desde el pasado 4 de junio.

España, Reino Unido, Andalucía y Gibraltar son las cuatro partes que Rajoy cree que deben sentarse a "hablar y dialogar" sobre los temas más controvertidos: la pesca y el medio ambiente, cuyas competencias están en manos de la Junta.

firmeza El jefe del Ejecutivo calificó de "atentado al medio ambiente" el lanzamiento por parte de Gibraltar "de manera unilateral" de 70 bloques de hormigón a la Bahía de Algeciras, lo que además impide faenar con normalidad a los pescadores españoles. Ha lamentado también la ruptura por parte del Peñón en marzo de 2012 del acuerdo de pesca firmado en 1999 y, en este sentido, explicó que estas decisiones dificultan "mucho" las relaciones.

Pese a ello, Rajoy insistió en que la postura de su Gobierno es "la apertura al diálogo" pero mientras eso llegue advirtió: "El Gobierno no renuncia a ninguna medida legal". Explicó que serán "medidas única y exclusivamente legales, proporcionales, aleatorias y que no discriminen para defender los intereses de los ciudadanos españoles".

"mejoría económica" Rajoy también aprovechó su despacho con el monarca para vender las bondades de la supuesta recuperación económica del país. El presidente anunció que desea aprobar una reforma fiscal "integral" en España antes del 31 de marzo de 2014 y, "a partir de ahí", revisar y sacar adelante un nuevo modelo de financiación autonómica con "el acuerdo y la unanimidad de todos". Rajoy expuesto al rey las perspectivas económicas de España, que sufre aún una situación "dramática" de paro, si bien los últimos datos "son positivos, esperanzadores" e "invitan al Gobierno "a seguir trabajando en la misma dirección". También explicó al monarca que la balanza de pagos presenta cifras "muy positivas", con un sector exterior que "está funcionando muy bien", una temporada turística "muy positiva" y unas exportaciones crecientes, lo que "prueba la competitividad de la economía española".