La comunidad internacional llama a la calma y aboga por el diálogo
la ue exige que egipto cumpla el trato de celebrar elecciones pronto y liberar al depuesto mursi
madrid/bruselas. Los choques ocurridos en El Cairo ayer entre partidarios del depuesto presidente Mohamed Mursi y la policía provocaron la reacción de la comunidad internacional, que condenó el uso de la fuerza y llamó a la calma a seguidores y detractores de Mursi. El Gobierno de España lamentó "profundamente" el alto número de víctimas mortales y heridos, y cuestionó el "excesivo uso de la fuerza" como método para resolver la grave crisis que vive Egipto.
El ministerio de Asuntos Exteriores español consideró que es esencial "dejar de usar la calle" como espacio de confrontación política y recuperar el diálogo y la negociación para evitar una escalada de la violencia y avanzar en la transición democrática. España reiteró la vigencia de las conclusiones del Consejo de Asuntos Exteriores de la Unión Europea del pasado 22 de julio, en las que se instó a las autoridades interinas de Egipto a liberar a su presidente derrocado, Mohamed Mursi, así como a todos los prisioneros políticos.
Por su parte, la responsable de la política exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, lamentó las muertes producidas en los disturbios y pidió a las autoridades interinas que garanticen unas manifestaciones "pacíficas y ordenadas". Así, la jefa de la diplomacia europea expresó su "preocupación" por los últimos acontecimientos y pidió a todos los implicados "que se abstengan de la violencia" y se ajusten a los principios de unas "protestas pacíficas y no violentas".
En la misma línea se expresó el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, que condenó el uso de la fuerza contra los manifestantes en Egipto y pidió la liberación o imputación de los detenidos tras la destitución del presidente Mohamed Mursi el pasado 3 de julio.
Hague también pidió "contención a todas las partes" y llamó "al diálogo", advirtiendo de que "es la responsabilidad de los líderes de todos los bandos tomar medidas para reducir la tensión". Francia, por su parte, pidió a todas las partes implicadas, "especialmente al Ejército", que "muestren calma" y lamentó el alto número de víctimas registrado en los disturbios. París invitó a las partes implicadas a "que busquen un compromiso para que surja pacíficamente una solución política y que se organicen en el más breve plazo posible las elecciones". El ministro de Asuntos Exteriores alemán, Guido Westerwelle pidió a las autoridades de ese país que permitan la celebración de manifestaciones pacíficas y que hagan lo posible para evitar una nueva escalada de la violencia.
Su homóloga italiana, Emma Bonino, pidió que comience lo antes posible "un diálogo serio" entre las distintas fuerzas políticas tendente a la reconciliación.
los datos
l 29 millones de personas secundaron la jornada de protesta. Al menos 29 millones de egipcios secundaron la convocatoria del Ejército para manifestarse anteayer a favor de autorizar al jefe militar, Abdelfatá al Sisi, a "afrontar la posible violencia y el terrorismo", según fuentes del aparato de seguridad citadas por la agencia de noticias oficial, MENA. El dato fue obtenido a partir de imágenes de satélites y de la información recogida por los aviones de las Fuerzas Aéreas. La fuente calificó esta movilización como la más multitudinaria de la historia de Egipto.
l EEUU dice que "no necesita" aclarar si hubo golpe de Estado. El Gobierno de Estados Unidos dijo ayer que "no necesita" determinar si hubo un golpe de Estado en Egipto y se remitió a las "quejas" de los ciudadanos egipcios contra el entonces presidente, Mohamed Mursi, según explicó la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki. "La ley no nos requiere que hagamos una determinación formal, esto es una revisión que ya hemos puesto en marcha, sobre si hubo un golpe de Estado y no es de nuestro interés nacional hacer tal determinación", afirmó Psaki, que insistió en que Washington "trabajará con el Congreso" para realizar el informe.
l En la misma cárcel. El ministro del Interior egipcio, Mohamed Ibrahim, reveló ayer que el derrocado presidente Mohamed Mursi probablemente ingresará en la cárcel cairota de Torah, donde se encuentra el expresidente Hosni Mubarak, depuesto en 2011. Ibrahim dijo que la decisión depende del juez instructor que lleva el caso -Mursi está acusado de homicidio y colaboración con Hamás-, pero ante la insistencia de los periodistas, señaló que "muy probablemente a Torah". Torah, a las afueras de El Cairo, es donde están presos Mubarak, sus hijos y otros altos cargos del antiguo régimen.