madrid. La Sección Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional condenó ayer a los tres integrantes del llamado comando Otazua, -Daniel Pastor, Iñigo Zapirain y Beatriz Etxebarria- a 45 años de prisión como coautores del asesinato con una bomba lapa del inspector de la Policía Nacional Eduardo Puelles en junio de 2009 en Arrigorriaga, el que fue el último atentando de ETA con víctima mortal en Euskadi.

La condena que responde con exactitud a la que solicitaba la Fiscalía, incluye el pago de una indemnización conjunta de 300.000 euros a la viuda de Puelles y de 150.000 a cada uno de sus hijos, así como la prohibición de acercarse a ellos a menos de 300 metros o residir en Bilbao. En cuanto a los años que los tres integrantes de ETA tendrán que pasar en prisión, el fallo les condena a treinta años por un delito de consumado asesinato terrorista y quince más por un delito de estragos terroristas, por lo que en total suman 45, aunque en un principio únicamente tendrán que cumplir 40 al ser tal el límite de prisión que prevé el Código Penal.

Asimismo, el tribunal de la Audiencia Nacional formado por los magistrados Félix Alonso, Guillermo Ruiz-Polano y Clara Eugenia Bayarri, descartó las denuncias de malos tratos que los condenados dijeron sufrir durante su detención. El fallo también destaca que entre las pruebas que demuestran que los tres condenados fueron los autores del asesinato de Puelles se encuentran las declaraciones que dos de ellos hicieron en sede policial, cuyo contenido ha sido corroborado por los registros que se realizaron en sus domicilios, así como las declaraciones testificales practicadas durante el juicio oral.

Según la sentencia, la madrugada del 18 al 19 de junio de 2009 Zapirain y Pastor colocaron una bomba lapa adosada al vehículo de Puelles aparcado en Arrigorriaga mientras Etxebarria vigilaba. Sobre las nueve de esa misma mañana, cuando el inspector se dispuso a arrancar el coche, se produjo la explosión que ocasionó su muerte.

satisfacción por la sentencia Después de conocer el fallo de la Audiencia Nacional, el hermano del inspector, Josu Puelles, afirmó que "en principio, se cumplen las expectativas de la familia". Asimismo quiso remarcar el deseo de la familia de que no haya "subterfugios ni maniobras políticas en el sentido de aminorar las penas o de beneficios penitenciarios", es decir, que esperan que los tres cumplan sus penas íntegramente.

Momento en que la Policía detiene al miembro de ETA Daniel Pastor. Foto: efe