El Gobierno portugués acusó al Partido Socialista (PS), de romper "unilateralmente" las negociaciones para alumbrar el "compromiso de salvación nacional" y reconoció por primera vez que podría adelantar las elecciones generales. Por su parte, el Partido Social Demócrata (PSD) recriminó al PS su "falta de realismo" y lamentó que haya rechazado su oferta de formar un Gobierno de "salvación nacional", tal y como pidió el presidente luso, Aníbal Cavaco, a fin de garantizar la estabilidad política del Ejecutivo. El líder de los socialistas, Antonio José Seguro, justificó su negativa a la falta de propuestas de estímulo económico y, según los medios lusos, a un paquete de recortes de 4.700 euros en materia social que el Gobierno conservador se negaba a retirar.
