Bilbao. La interconexión de las haciendas vascas para intercambiar datos fiscales que permitan incrementar la lucha contra el fraude dará sus primeros pasos esta misma semana. La comisión técnica encargada de atar un acuerdo en esta materia, al menos entre las Diputaciones Forales de Bizkaia y Gipuzkoa, celebrará mañana su primera reunión. Cuatro funcionarios por cada una de las instituciones forales tratarán de bajar al detalle de los protocolos y actuaciones concretas que es necesario activar para dar luz verde a un acuerdo de colaboración.

La interconexión de datos de las haciendas es un asunto nuclear que está centrando el debate sobre fiscalidad abierto en varios frentes, tanto en el institucional como en las reuniones abiertas por el partido del lehendakari, Iñigo Urkullu (PNV), con el resto de formaciones del arco parlamentario de cara a llegar a un acuerdo para la reforma fiscal y la lucha contra el fraude.

La propuesta sobre la que trabajarán mañana los técnicos de las haciendas vizcaína y guipuzcoana toma como referencia el convenio suscrito en mayo de 2011 entre la Diputación de Gipuzkoa, entonces gobernada por el jeltzale Markel Olano, y la Agencia Tributaria del Estado. Dicho acuerdo detallaba que la hacienda guipuzcoana solo puede acceder a los datos de contribuyentes que hayan tenido alguna vinculación con su territorio. Trasladado a un posible convenio entre los dos territorios significaría que, por ejemplo, Bizkaia solo podría conocer los detalles de una operación realizada en Gipuzkoa por un contribuyente vizcaíno. Y viceversa. El convenio guipuzcoano con la Agencia Tributaria descarta que cualquiera de las dos partes pueda acceder de manera arbitraria a las bases de datos.

Conscientes de que los partidos gobernantes en Bizkaia y Araba podrían ver con buenos ojos una fórmula parecida a la que se lleva empleando en los dos últimos años en Gipuzkoa con respecto a la agencia estatal, la diputación que dirige Martin Garitano (EH Bildu) emplazó a ambas instituciones a compartir datos fiscales. Ya hace un mes, la diputación dirigida por el jeltzale José Luis Bilbao mostró su disposición a debatir acerca del borrador que le trasladó Gipuzkoa.

Cualquiera que sea la materialización del acuerdo, las fuentes consultadas precisan que la reunión de mañana será de carácter técnico y no se descarta que puedan precisarse más encuentros para limar diferencias, también técnicas. Para el arranque de la interconexión de datos -asunto principal que condiciona a su vez la disposición del PSE a llegar a un acuerdo con el PNV en esta materia- será necesaria la rúbrica de los responsables políticos de las dos instituciones.

Mientras tanto, los partidos siguen poniendo el foco en las negociaciones sobre fiscalidad entre PNV y PSE, que se encuentran en un estadio avanzado. El dirigente abertzale Joseba Permach, que ayer acudió en representación de EH Bildu a un acto con LAB, mostró en dicho encuentro su preocupación por que el acuerdo de PNV y PSE intente un "cierre en falso" de la reforma fiscal. En ese sentido, abogó por una reforma "de verdad, profunda", que aborde tanto el IRPF como el Impuesto sobre Sociedades o de grandes fortunas "para asegurar que en todos ellos paga más el que más tiene".

Por su parte, la popular Arantza Quiroga consideró un "error" plantear un acuerdo de fiscalidad simplemente como solución a "las urgencias que tiene ahora mismo el Gobierno vasco". En este punto, pidió acuerdos con "más recorrido", en referencia a los Presupuestos de 2014. "A nadie se le escapa -afirmó- que el acuerdo que se pueda producir en materia fiscal es el preámbulo de un acuerdo presupuestario".