Vitoria. En solo tres días el PP de la CAV ha resuelto su vacío de poder. Si el martes se hacía oficial que la marcha de Antonio Basagoiti de la política vasca para trabajar en México era inminente, ayer el todavía presidente zanjaba cualquier posibilidad de estropear la hoja de ruta que había escrito para su relevo. La cúpula del PP de la CAV, en concreto cinco dirigentes, adoptaron la propuesta de Basagoiti para que Arantza Quiroga le suceda al frente del partido, en clara contradicción con lo que el líder popular había asegurado este mismo jueves, aquello de que no designaría a nadie "a dedo".
La propuesta será refrendada el lunes por las tres juntas directivas territoriales y el martes por la Junta Directiva del PP vasco. A finales de junio o a lo sumo en julio, una junta regional convocada expresamente para tal fin hará efectivo el relevo. Pese a que se había rumoreado que el nombramiento podría ser provisional, no lo será. Quiroga dirigirá el partido en su calidad de presidenta hasta el congreso ordinario de la formación previsto para 2015, en el que, por primera vez durante este proceso sucesorio, las bases populares podrán pronunciarse.
Con este nombramiento exprés, el PP conjura el fantasma de la división, esquiva un liderazgo provisional y presenta un equipo sólido de cara al nuevo curso político que se abrirá en septiembre, según se encargó de remarcar ayer la formación conservadora.
El PP no quiere que la apuesta por Quiroga se entienda como un triunfo de un territorio sobre otro, por lo que incluye en su receta a futuro la continuidad del alavés Iñaki Oyarzábal como número dos de la Ejecutiva presidida por la dirigente guipuzcoana. Es el "tándem Quiroga-Oyarzábal", como explicaron ayer fuentes de los populares, el que concita "más apoyos y ofrece mayores garantías de continuidad en la consolidación del proyecto del PP vasco" desarrollado por Basagoiti.
malestar alavés El factor Oyarzábal es muy importante en este proceso sucesorio por dos motivos. El primero tiene una lectura en clave interna, ya que mitiga en parte la decepción del aparato del partido en Araba, que pretendía colocar por primera vez un presidente del PP vasco procedente de este territorio. Aunque no es la provincia con más afiliados populares, Araba se ha convertido en el bastión institucional de los conservadores en la CAV, donde gobiernan tanto la Diputación como el Ayuntamiento de Gasteiz. La opción de los alaveses pasaba por llevar a liderar el partido al presidente de la formación en Araba y actual portavoz del grupo del PP en el Congreso de los diputados. Alfonso Alonso no se ha postulado pero ha escuchado las peticiones que desde Gasteiz le llegaban a Madrid en las últimas semanas. Sin embargo, los rápidos movimientos de los últimos días de Basagoiti para afianzar como relevo a Quiroga han dejado sin capacidad de reacción al diputado alavés.
La dirección estatal del PP, y en concreto Mariano Rajoy, ha santificado la candidatura de la parlamentaria guipuzcoana después de mantener varias reuniones con Basagoiti en los últimos diez días. En ellas, el todavía presidente de los populares de la CAV ha defendido la idoneidad de que sea Arantza Quiroga el relevo natural tras su marcha a México. El handicap de Alonso ha estado, para pasmo de propios y extraños, en la labor que realiza siendo el portavoz del PP y de las políticas de Rajoy en el Congreso. Su más que solvente trabajo en un momento muy difícil en el que los populares deben sacar la cara a los recortes del Ejecutivo le han hecho ganar enteros en Madrid. Su relevo en la Cámara baja traería más quebraderos de cabeza a Rajoy.
Así pues y visto que sus opciones se estaban desvaneciendo, el propio Alonso declaraba ayer por la mañana a algunos periodistas que no iba a hacer batalla política. Tanto es así que él, como presidente del PP alavés, fue uno de los elegidos para certificar ayer la decisión de encumbrar a Quiroga, junto a los presidentes en Bizkaia y Gipuzkoa, Antón Damborenea y Borja Sémper -este último se descartó de la carrera por la sucesión a principios de semana-, el secretario general de la formación, Iñaki Oyarzábal, y el propio Basagoiti. Fuentes del PP negaron que se haya cerrado en falso el asunto de la aspiración de los afiliados alaveses, ya que dos de los cinco dirigentes que se reunieron ayer al mediodía, Oyarzábal y el propio Alonso, son de este territorio. Además, apuntaron que el encuentro de ayer sirvió para certificar la "consolidación de la figura de Alfonso Alonso como interlocutor del PP vasco en Madrid".
el contrapunto Existe una segunda derivada de importancia de ensalzar que Oyarzábal hará "tándem" con Quiroga al frente de la formación. Su figura como número dos contrarresta el perfil más conservador en asuntos sociales de la virtual líder del PP, de quien son conocidas sus opiniones contrarias al aborto o los preservativos. Oyarzábal, por el contrario, ha demostrado durante los últimos tiempos, en especial desde que en 2008 hizo pública su condición de homosexual, ser la voz del ala más progresista en asuntos relacionados con políticas sociales como el matrimonio entre personas del mismo sexo. Fuentes del partido restaron ayer importancia al "perfil" conservador ya conocido de Quiroga quien, sin embargo, integra desde el inicio el proyecto que dibujó Basagoiti para el PP vasco en 2008 cuando sucedió a María San Gil y apostó por sacarlo de las "catacumbas".
Quiroga hará su puesta de largo como líder regional del PP la semana que viene, en la reunión interparlamentaria de la formación en Salamanca, que contará con la plana mayor del partido de Rajoy.