Bamako. El presidente interino de Malí, Dioncounda Traoré, confirmó ayer la celebración de elecciones presidenciales en julio. Traoré quiso tranquilizar con este anuncio tanto al pueblo maliense como a la comunidad internacional, que reclama estas elecciones para poner fin a la actual crisis del país.
"Las elecciones tendrán lugar, como estaba previsto, el próximo julio. No habrá ya zonas sin derecho", aseguró Traoré en alusión a la ocupación que vivía el norte del país por grupos islamistas armados y rebeldes tuareg, hasta la intervención militar francesa. Traoré intentó disipar así las dudas de la clase política local que, entre los obstáculos para la celebración de comicios en los plazos anunciados, subraya la falta de un fichero electoral y el riesgo de que no participen al menos 400.000 personas huidas del norte del país por miedo a los islamistas.
