bilbao. En la pasada legislatura, la Ponencia de Paz contó con el PP, pero no con las fuerzas de Bildu, y ahora ocurre a la inversa. ¿Qué falla?

Hay que partir de lo que hemos vivido en la historia reciente de este país. Nunca, ni siquiera en el Pacto de Ajuria Enea, estuvieron todas las fuerzas sentadas en la misma mesa. Por lo tanto, hay que partir de una realidad de desconfianza y enfrentamiento, sobre todo entre el PP y Batasuna. En todo caso, hemos hecho un avance importante en el último año por un dato objetivo: hubo un suelo ético compartido en la legislatura pasada sin las fuerzas de Bildu pero, en el reciente pleno monográfico sobre esta cuestión, EH Bildu dijo estar de acuerdo con todo ese texto salvo con una frase.

Entonces, ¿detrás de las polémicas hay mimbres para el acuerdo?

No solo hay mimbres. Hay acuerdos como el que he mencionado. Que EH Bildu haya suscrito que tiene que haber una paz con memoria, que ninguna causa política ni razón de Estado puede estar encima de la dignidad humana, no es solo un compromiso de cara al futuro, sino que supone también una autocrítica a su pasado. Se ha dado un primer paso, y el PP va a estar. No vamos a acabar la legislatura con esta foto. Lo que existe también es mucha desconfianza. El PP no se cree que EH Bildu quiera realmente alcanzar una paz y convivencia entre diferentes, porque hasta ayer por ideas políticas se ha matado en este país. Lo entiendo, porque a día de hoy Batasuna todavía no ha dicho que ha estado mal. Pero también he dicho a miembros del PP que esa duda la trasladen cara a cara, en la Ponencia, que es un ámbito propicio porque se puede hablar con total discreción.

¿Le preocupa que el PP no participe en la Ponencia? Tiene la llave de la política penitenciaria...

Lo óptimo sería que estuvieran, pero no porque estén en el Gobierno. Hay que pactar una hoja de ruta para la salida progresiva y la resocialización de los presos pero eso, aunque esté en manos del Gobierno central, en procesos similares, y sobre todo en Irlanda, no es algo que se haya decidido solo por parte del Gobierno, sino que ha habido acuerdos amplios de la propia sociedad que los va a acoger, que acuerdan qué tipo de condiciones se va a exigir a los presos para esa resocialización. Un acuerdo en el Parlamento Vasco sería una palanca importante de cara a los movimientos del Gobierno central.

¿Cómo valora el acuerdo de PNV, PSE y PP en el monográfico de paz, que buscaba atraer a los 'populares'?

Esa es una lectura de EH Bildu. Era el acuerdo que ya existía en la pasada legislatura. El PP ya había suscrito ese suelo ético el pasado mes de julio. Ahora, los que siguen estando en el Parlamento vuelven a suscribirlo. La novedad fue que EH Bildu dijo estar de acuerdo en todo, salvo en la frase que decía que la memoria debía servir para la deslegitimación ética y política del terrorismo.

Pero sí se hizo la lectura de que se buscaba presionar a EH Bildu para que se pronunciara sobre las víctimas de ETA, y para tranquilizar así al PP...

Lo dijo EH Bildu. En el texto que se votó no se hablaba de condenar a ETA. Y lo hicimos así en la pasada legislatura aposta, para renovar el lenguaje y que el atasco no se produjera siempre en lo mismo. Algunos necesitaron explicar su no voto a cosas tan básicas como un suelo ético, y por ello hicieron esas lecturas.

El PP argumenta su negativa a participar en que EH Bildu ha endurecido su discurso. ¿Lo ve así?

Es verdad que algunas personas de EH Bildu, sobre todo de la tradición de Batasuna, tienen que ir superando algunos discursos. Una cosa es que, cuando digas que la violencia tuvo causas políticas, digas que estás intentado explicar lo que pasó. Lo que no se puede hacer es explicarlo como si fuera una causa-efecto natural. Es consecuencia de que algunas personas han recurrido a la violencia ante un conflicto político, libremente y con su propia responsabilidad. Tratar de volver a explicar lo inexplicable con esa retahíla no ayuda a generar nuevas confianzas.

EH Bildu ha dicho que su prioridad en ese foro serán los presos. ¿Le parece una forma correcta de enfocarlo?

Entiendo que su prioridad sea esa. En la Ponencia hay dos partes importantes: las consecuencias de la violencia, donde están la memoria de las víctimas y los presos; y reconstruir la convivencia. En esta primera parte, falta el tema de los presos porque, felizmente y aunque nos falta el segundo decreto de víctimas policiales, el tema de las víctimas está bastante encaminado. El tema de los presos tiene su importancia, aunque ya estaba en el guion que habíamos establecido la pasada legislatura. Es perfectamente comprensible que para EH Bildu sean la prioridad. Si alguien quiere cogerse a esa excusa para decir que EH Bildu plantea ciertas cosas...

¿Es una opción que la Ponencia de Paz parta de cero, o no es posible?

No es posible. De hecho, los impulsores de la Ponencia en esta legislatura, PSE y PNV, recogieron expresamente en la proposición que se votó que partía de la legislatura pasada. El trabajo realizado es un trabajo positivo que no tiene nada de malo, e insisto: cuando a EH Bildu se le ha preguntado qué problema tiene con lo que se acordó, solo hay una frase que no le gusta. Con lo cual, ¿qué problema hay para iniciar los trabajos con algo que ya es acuerdo entre todos, incluso el PP y EH Bildu?