vitoria. Las próximas tres semanas serán determinantes para conocer si los primeros presupuestos de la legislatura del lehendakari Iñigo Urkullu tienen futuro. El PNV por sí solo no tiene el respaldo parlamentario suficiente para garantizarse la aprobación del proyecto de Presupuestos que presentó hace un mes. Por lo pronto, el consejero de Hacienda, Ricardo Gatzagaetxebarria, ha citado para esta misma semana a PSE, PP y UPyD para sendas reuniones de carácter "informativo" en las que retomar los contactos que inició en una primera ronda en marzo.
EH Bildu también espera ser convocada, lo cual no será óbice para que hoy mismo, antes de ese previsible encuentro con Gatzagaetxebarria, la portavoz de la coalición, Laura Mintegi, anuncie su decisión sobre las Cuentas. Todo apunta a que podría revelar que la decisión definitiva de la coalición pasa por la enmienda a la totalidad, con la que lleva amagando semanas. En todo caso, ningún partido de la oposición es optimista sobre la posibilidad de acuerdo y todos han anunciado, en un momento u otro, su voluntad de enmendar las Cuentas si no llegan a compromisos con Urkullu.
Aun consciente del negro panorama, el PNV no tira la toalla. Su portavoz parlamentario, Joseba Egibar, testimoniaba el pasado sábado que "todavía hay tiempo para explorar" la posibilidad de llegar a acuerdos. El objetivo de los jeltzales es garantizarse más votos en contra que a favor de dichas enmiendas a la totalidad durante el pleno del Parlamento del día 26. Un posible voto conjunto de EH Bildu y el PSE obligaría al PNV a sumar a sus 27 parlamentarios los 10 del PP y el escaño de UPyD si quiere contrarrestar la devolución de las Cuentas. En todo caso, el partido de Urkullu lograría salvar este primer trámite parlamentario si esa eventual enmienda a la totalidad solo contara con los votos del grupo proponente.
La presidenta del Bizkai Buru Ba-tzar, Itsaso Atutxa, ha concretado que el arco de actuación más factible para los jeltzales en este momento lo plantean PP y UPyD, más proclives que el resto a la hora de entrar a negociar. EH Bildu reclama de partida la retirada del proyecto presentado por Urkullu, al que se ofrece para elaborar uno nuevo. El PSE, por su lado, sigue condicionando cualquier acercamiento a que los jeltzales modifiquen tanto el capítulo de gastos como el de ingresos, ya que el presente presupuesto contará con 1.132 millones de euros menos que el del año pasado.
El más inclinado al acuerdo es el PP, que previsiblemente entregará mañana en el encuentro con Gatzagaetxebarria el documento en el que plasmará su propuesta de pacto a tres entre su formación, el PNV y el PSE, como ya anunció la semana pasada Antonio Basagoiti. Finalmente, el portavoz de UPyD, Gorka Maneiro, confirmó ayer que en su reunión con el consejero prevista para el miércoles trasladará algunas de sus propuestas, como un plan conjunto de lucha contra el fraude fiscal, el cierre de las delegaciones en el exterior y la eliminación de "ciertas partidas identitarias".
