ponferrada. El alcalde de Ponferrada (León), Samuel Folgueral, anunció ayer que se mantendrá en el cargo, pese a que el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, le había ordenado su renuncia, e informó de que abandonan la militancia del partido, tanto él como sus siete concejales.

Folgueral compareció ayer en rueda de prensa en Ponferrada por primera vez después de que el viernes por la noche el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, le exigiera que renunciara al cargo de regidor por haber pactado una moción de censura con un concejal condenado por acoso sexual. Defendió que se mantendrá en la Alcaldía y que se han respetado todos los trámites estatutarios para presentar esta moción de censura contra el PP, apoyados por Independientes Agrupados de Ponferrada (IAP).

Folgueral, que encabezó la lista del PSOE en las elecciones de 2011 como independiente, y que se afilió al partido hace un año escaso, reprochó a Rubalcaba no haber podido tener contacto con él de "ninguna manera" durante estas últimas 48 horas. Es más, desveló que se ha enterado por los medios de comunicación de la petición del secretario general de rectificar la moción de censura, que prosperó el pasado viernes.

En Ponferrada, gobernaba el PP con 12 concejales, frente a 8 del PSOE y 5 ediles de IAP, uno de los cuales Ismael Álvarez, fue condenado por acoso sexual en el caso Nevenka. Álvarez renunció el sábado al acta de concejal como se había pactado antes de la firma de la moción de censura contra el alcalde del PP, Carlos López Riesco.

Rubalcaba pidió al alcalde que renunciara al cargo y rectificara la moción de censura, horas después de que ésta ya hubiera prosperado.

El alcalde aseguró no entender que se haya preparado este "circo mediático" por esta moción de censura, cuando su presentación estaba ya "explícita suficientemente y comunicada" al partido. Opinó que en el PSOE "se están jugando otras partidas" y se ha elegido Ponferrada como escenario.

En Ponferrada, se celebró ayer el Congreso del PSOE del Bierzo, a cuya clausura asistió el secretario general del PSOE de Castilla y León, Julio Villarrubia, quien dejó claro que tanto el alcalde como los concejales quedan "total y absolutamente desautorizados" por el PSOE, un partido al que ya no pertenecen y que no les ofrecerá "respaldo".

Minutos después de hablar con Rubalcaba, Villarrubia dijo: "Que no haya ninguna duda que ésta no es una maniobra del PSOE para engañar y querer una alcaldía, porque así no la queremos". Señaló que el PSOE avala la necesidad de cambio político en Ponferrada, pero "con un matiz", que no se puede obtener la alcaldía con "el voto de una persona condenada por acoso sexual y para más INRI el día de la Mujer Trabajadora". Jurídicamente puede ser válido, pero políticamente "no se puede aceptar", dijo. Villarrubia dejó claro que la ejecutiva regional del PSOE no ha participado en el desarrollo de esta moción de censura.

Sobre este último episodio, el secretario general del PSM, Tomás Gómez, dijo haber "sufrido" al ver tan "expuesto" al secretario general del PSOE con este asunto.