Pamplona. Con el semblante serio que exige la ocasión, y arropada por todo el Gobierno, Yolanda Barcina anunció el 28 de septiembre de 2011 el mayor recorte de la historia de Navarra. Un tajo de 190 millones de euros que golpeaba a la Sanidad, a la Educación y al tejido empresarial, y que llegaba apenas 48 horas después de que tanto ella como su consejero de Economía, Álvaro Miranda, el expresidente Sanz y el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, se embolsasen la última doble dieta procedente de Caja Navarra.
Y no fue una dieta cualquiera. Ascendió a 3.434 euros por una doble sesión cuya primera parte apenas duró unos minutos. No había en ella nada de lo que informar, tal y como se recoge en el acta del 26 de septiembre, por lo que el asunto en sí apenas pudo llevar unos minutos a sus cuatro asistentes. Pese a ello, Miguel Sanz cobró 2.680 euros y Yolanda Barcina, Álvaro Miranda y y Enrique Maya, 1.717 euros cada uno. Acto seguido y sin necesidad siquiera de levantarse de la mesa, da comienzo otra reunión, está sí algo más larga, y en la que se informa a los cuatro miembros de UPN de los principales hitos de la actividad financiera de Caja Navarra y Banca Cívica, así como de las futuras modificaciones estatutarias de la entidad, entre otros aspectos. Se trata, en cualquier caso, de una sesión informativa, como el resto de las que celebra la Junta de Entidades y su Comisión Permanente. No consta en el acta, al igual que sucede en las 15 anteriores, que ninguno de los asistentes mostrara objeción alguna o tomara la palabra con algún asunto relevante. Por esa reunión, los cuatro cargos vuelven a cobrar la cantidad establecida, de tal manera que, en media mañana, Miguel Sanz ha ingresado 5.360 euros y Yolanda Barcina, Álvaro Miranda y Enrique Maya, 3.434 cada uno. Es lunes, no ha llegado todavía la hora de comer, y difícilmente alguno de los cuatro ha podido comenzar mejor la semana.
pacto con el pp Dos de los cuatro asistentes a esa reunión, Yolanda Barcina y Álvaro Miranda, comparecen ante los medios de comunicación 48 horas más tarde, justo después de la sesión de Gobierno. Y lanzan a la ciudadanía el mensaje de sudor y lágrimas de quien anuncia recortes presupuestarios casi porque no le queda otro remedio. Hay que apretarse el cinturón, vienen a decir ambos, acompañados por Roberto Jiménez, entonces vicepresidente de un gobierno de coalición que no tardaría en hacer agua.
"La situación económica nos obliga a hacer estos ajustes", resumió Barcina, que pidió "la compresión, el apoyo y el esfuerzo" a la sociedad, y que defendió que estas medidas garantizan "el mejor futuro para Navarra". "Hemos intentado que los pilares del Estado del bienestar tengan la menor afección posible", añadió la presidenta. Se trata de un tijeretazo de 190 millones, que no será el último, pero que afecta especialmente a la UPNA y a las obras públicas. El efecto de estas políticas no puede resultar más demoledor: el desempleo comienza a repuntar con fuerza y la economía navarra pasa de crecer más que la media a desplomarse con mayor intensidad que la del resto. Sanidad y educación, los dos departamentos con mayor carga social, ven cómo su presupuestos se recortan en 45 millones de euros.
La actividad de Barcina no se detiene y al día siguiente suscribe un acuerdo electoral con el Partido Popular que supone toda una declaración de intenciones. "No podemos perder ni un voto del centro derecha", dice quien ha incluido en su Gobierno al PSN de Roberto Jiménez y quien es consciente de las consecuencias de una decisión que incluso dentro de su propio partido genera rechazo: formar con el PP supone encadenarse a los recortes que el nuevo Gobierno presidido por Mariano Rajoy tiene pensado aplicar y a medidas tan polémicas como la reforma laboral.
el estallido Barcina marca así la apertura del curso político 2011-2012 con dos medidas de muchísimo calado. Pero dos semanas después DIARIO DE NOTICIAS publica que durante el último año ha venido cobrando de Caja Navarra una doble dieta desconocida hasta ese momento. La revelación sacude la actualidad y obliga a Barcina a jugar a la contra: 96 horas después de conocerse la existencia de la Comisión Permanente de la Junta de Entidades Fundadoras anuncia la supresión de las dietas. Esta comisión no vuelve a reunirse desde entonces.
La sucesión de escándalos que afectan a Caja Navarra termina con las dietas en los tribunales y descubre un modo de operar, con dobles sesiones en una misma mañana, que termina por multiplicar el escándalo. Un punto y seguido de un recorrido plagado de hechos que lastran la imagen de Barcina que en 2011, mientras percibía las dobles dietas por quinta vez y esperaba ser investida presidenta del Gobierno, se dio de alta en la UPNA para cobrar 19 días.