Roma. El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, alegó ayer su hospitalización tras empeorar la conjuntivitis que padece para no acudir a una vista prevista en el Tribunal de Milán por el llamado caso Ruby, en el que está imputado por prostitución de menores y abuso de poder.

Los abogados de Il Cavaliere han informado al tribunal de que éste se encuentra ingresado en el hospital San Rafael de Milán después de que ayer su médico personal le diagnosticara uveitis, una inflamación de la úvea del ojo.

Para la fiscal del caso, Ilda Boccassini, el argumento esgrimido por Il Cavaliere no representa un "legítimo impedimento absoluto" y por tanto ha reclamado que la audiencia siga adelante como estaba previsto.

Asimismo, la fiscal ha criticado que inicialmente los abogados de Berlusconi habían argumentado que éste no podría asistir porque tenía que presidir una reunión de su partido y posteriormente un encuentro con el primer ministro saliente, Mario Monti, para luego abandonar "los motivos institucionales" por "motivos de salud".