vitoria. "Creo firmemente en el actual modelo. Se ha demostrado que funciona". El lehendakari, Iñigo Urkullu, no quiso dejar lugar a ambiguas interpretaciones cuando en el Pleno de control de ayer respondió sobre la posibilidad de reformar la Ley Electoral para variar el reparto paritario de escaños del que disfrutan hoy en día Álava, Bizkaia y Gipuzkoa pese a sus diferencias en el número de habitantes.

Urkullu quiso zanjar así la cascada de especulaciones que surgió a raíz de unas declaraciones del diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, en relación al debate sobre la posibilidad de trasladar al Parlamento Vasco las competencias fiscales que están en mano de las Juntas Generales de cada territorio.

Bilbao sostuvo que este cambio debería implicar también una variación en la representación de cada territorio en la Cámara vasca, con un notable incremento para los aforados elegidos en Bizkaia en perjuicio de los guipuzcoanos y, sobre todo, de los alaveses.

El propio diputado general dejó entrever que esta visión resulta de todo punto improbable en la actualidad, pero aún así UPyD y PP quisieron escuchar ayer la versión del lehendakari sobre esta vía. Urkullu descartó esta alternativa que sí enmarcó en la hoja de ruta del partido de Gorka Maneiro, contrario a esta práctica, pese a que el único aforado de UPyD en el Legislativo autonómico se vio favorecido por este sistema al ser elegido en Álava por un número de votos que hubiera resultado insuficiente en los demás territorios.

Carmelo Barrio, por su parte, lamento que Álava sea la "pagana" cada vez que se insinúa un cambio en el régimen electoral.