Palma. El juez instructor del caso Nóos, José Castro, da validez a los correos aportados a la causa con los que el exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, quiere probar que la Casa Real supervisaba las actividades del Instituto Nóos, aseverando que la "autenticidad" de los mismos "mayoritariamente no ha sido puesta en duda por los, en algunos casos, intervinientes, y en otros aludidos", en referencia a las personas cuyo nombre figura en los correos. Pese a esta decisión, la Fiscalía Anticorrupción no ve ningún indicio para actuar contra la Casa Real o la infanta Cristina y mantiene que las últimas declaraciones, investigaciones y correos entregados por Torres, "no han aportado prueba alguna que avale una supuesta intervención en los negocios del duque de Palma". Pero es más, en unas sorpresivas filtraciones se asegura que la Fiscalía tampoco ve indicios delictivos en el círculo próximo a las infantas.
Aunque la Fiscalía ve "muy claro" que este caso acabará en juicio contra la mayoría de los imputados, entre ellos Urdangarin, también considera que el caso "no afectará a ningún miembro más de la Familia Real, con arreglo a las pruebas existentes en la actualidad y teniendo en cuenta que ya se llevan dos años de investigación".
Matizaciones Este análisis, matizado horas más tarde por otras fuentes de Anticorrupción que dijeron que "la Fiscalía aún no ha tomado ninguna decisión", sorprende porque choca de frente con el sentido del último auto del juez Castro. Y es que el instructor del caso Nóos sí da validez a las pruebas presentadas por Torres y éstas demostrarían precisamente que la Casa Real tuteló los negocios de Urdangarin. Mediante la providencia dictada ayer, el magistrado sostiene que los emails de Torres tienen "como nota común" el hecho de que su envío o recepción se ha producido "en el entorno de la Asociación Instituto Nóos de Investigación Aplicada o de la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (pertenecientes al entramado de Nóos), y han venido al pleito de la mano de su responsable", en alusión al exsocio del duque de Palma.
Hay que recordar que uno de los nombres que más figura en los correos es el del secretario personal de las Infantas, Carlos García Revenga, quien en un correo remitido al Duque, en octubre de 2003, le ofrecía instrucciones sobre la forma como el marido de la Infanta debía responder a diversas propuestas empresariales. También el nombre del asesor externo de la Casa Real y Conde de Fontao, José Manuel Romero, figura en varios de los correos recomendando a Urdangarin guardar las apariencias si seguía al frente de sus negocios.