Bilbao. Buena parte del discurso de Patxi López, que iba a estar destinado en principio a hacer balance de su gestión al frente del PSE, estuvo dedicado, finalmente, a repasar la gestión del Gobierno Vasco durante los tres años y medio de legislatura socialista. Su visión no pudo ser más positiva: calificó esos años de "históricos", ya que, afirmó, los socialistas fueron capaces de "acabar con el terrorismo y consolidar la convivencia". Hasta tal punto recordó con agrado su etapa de lehendakari que aseguró, sin atisbo de ironía, que el PSE construyó el "mejor Gobierno" de la historia de Euskadi y animó a los delegados socialistas a compararlo "con cualquier otro". "Y por eso -resumió- todos podemos decir con orgullo: nosotros estuvimos allí".
Por el contrario, empleó toda su artillería dialéctica para denostar la labor de oposición del PNV en aquellos años y su actual gestión al frente del Gobierno Vasco. "Con el PNV gobernando vamos a terminar la legislatura con menos servicios públicos y prestaciones, y más deuda pública", clamó. Remarcó que, gracias a los socialistas, en el debate político de la presente legislatura se han introducido la reforma de la LTH y la relacionada con la fiscalidad.
Por la tarde, tras ser elegido de nuevo secretario general del PSE, hizo un llamamiento a los militantes a "combatir" y a hacer frente a unos nacionalistas "crecidos tras volver al Gobierno" y a una derecha cuyas políticas "desmantelan lo que ha costado levantar en este país con sacrificio".
Pese a reconocer sentirse "orgulloso" por haber sido lehendakari, aseguró que no hay "mayor honor" para un militante socialista que ser su secretario general. Más que ser lehendakari, confesó.
