pamplona. Las denuncias presentadas por Kontuz! y UPyD con el objetivo de esclarecer la desaparición de Caja Navarra (CAN) van a ser investigadas en profundidad. La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona, Mª Paz Benito Osés, hizo público ayer un auto en el que ordena la práctica de una amplísima batería de diligencias sobre lo ocurrido en la entidad desde el año 2002.
De entrada, la juez acumula en una misma pieza las demandas de Kontuz! contra el expresidente del Gobierno navarro Miguel Sanz y el exdirector general de Caja Navarra Enrique Goñi -ambos acusados de delitos societarios y de prevaricación por ocultación de datos-, y también la cursada por UPyD ante la Fiscalía contra CaixaBank y catorce consejeros de Banca Cívica. Entre ellos se encuentran los navarros José Antonio Asiáin y Jesús Alberto Pascual, además del propio Goñi. Éstos son acusados, entre otros delitos, de apropiación indebida, estafa, falsificación de cuentas y maquinación para alterar el precio de las cosas.
En la resolución judicial, que puede ser recurrida, la magistrada acuerda remitir a la Audiencia Nacional para su investigación la parte de la denuncia de UPyD relativa al proceso de fusión de Caja Navarra, Caja Burgos, Caja Canarias y Caja Sol, que derivó en la constitución de Banca Cívica. Antes de decidir si los denunciados pasan a ser imputados, la juez ha decidido establecer una serie de diligencias. A Caja Navarra le pide las actas de las reuniones de la opaca Junta de Entidades Fundadoras "y de las respectivas comisiones que autorizaron la composición y cantidades a abonar". También reclama "los recibos acreditativos del pago de las dietas a los asistentes a dichas reuniones", las cuentas auditadas desde 2002 a 2010, así como que detalle "las operaciones de crédito, aval o garantía efectuadas desde 2005 a 2009". Asimismo, solicita al Banco de España, que aporte "los informes, documentos y expedientes elaborados por el Grupo de Inspección" encargado de investigar la CAN desde 2002 a 2009.
Manifestación del sábado contra lo sucedido en la CAN. Foto: unai beroiz